Normalmente para hacer una mermelada se añade el azúcar junto con la fruta y se cuece. En este caso he añadido el azúcar al final en forma de sirope. Así he podido controlar el nivel de dulce añadiendo poco a poco el sirope. Las fresas son noruegas y ya de por sí están bastante dulces.
Ingredientes
800gr de fresas70gr de ruibarbo2 cucharadas de miel1 cucharada de zumo de limónpara el sirope70gr de azúcar70ml de aguaLimpia las fresas y ponlas enteras, sin el tallo, en una olla amplia. Añade el ruibarbo cortadito en rodajas finas, la miel y el limón. Lleva a ebullición. Las fresas empezarán a soltar agua y al principio la mermelada estará muy líquida.
Sigue reduciendo hasta que se cree una pasta más espesa. Esto te llevará unos 30-40 minutos a fuego medio.
Prepara el sirope. Pon agua y azúcar en una olla y lleva a ebullición. Mantén en el fuego hasta que empiece a estar un poco espeso, ten en cuenta que luego cuando enfríe estará más espeso aún, así que controla esto.
Ve añadiendo sirope a la mermelada, de cucharada en cucharada, hasta que te guste el nivel de dulzor. ¡Listo!