Some Kind of MonsterAño: 2004Duración: 140 minutos País: EE.UU.Género: Documental musical.Dirección: Joe Berlinger, Bruce SinofskyIntérpretes: James Hetfield, Lars Ulrich, Kirk Hammet, Robert Trujillo, Dave Mustaine, Jason Newsted, Bob Rock, Phil TowleMúsica: Metallica
Metallica, una de las bandas más grandes de la historia del heavy metal, se enfrenta en este documental a uno de los mayores retos de su carrera: la reunión dentro de un estudio de grabación después de cinco años de proyectos paralelos y vidas totalmente separadas, para preparar el lanzamiento de su polémico disco St.Anger. Durante casi dos horas y media de duración, la banda de California mostrará en pantalla todo un rosario de miserias, egos enfrentados, problemas y discusiones varias. Some Kind of Monster va mucho más allá de lo que estamos acostumbrados a ver en un simple documental musical y profundiza de lleno en las bases y mecanismos de las relaciones humanas complejas, en lo que sin duda sería un perfecto ejercicio recomendable para cualquier estudiante de psicología.
En un claro intento de limar esas asperezas enquistadas en lo más profundo del grupo, Metallica contrata a un psicólogo deportivo especialista en tratar con vestuarios difíciles en deportes como el baloncesto NBA. Phil Towle será el recurso de la banda para que medie entre los diferentes miembros del grupo y ayude a terminar con las diferencias entre ellos y así evitar la sombra de disolución que planeaba sobre la banda. ¿El resultado? Mejor lo comprobaís vosotros mismos, ya que las apariciones de la banda junto al psicólogo son escasas, aunque intensas. La no inclusión de mayor metraje de este tipo nos da a entender la alta temperatura que se tuvo que vivir entre los miembros de la banda y su terapeuta durante dichas sesiones...
Durante el documental seremos testigos de momentos clave en la historia reciente del grupo y de escenas en ocasiones dantescas que diseccionan la compleja matriz de las grandes bandas, donde los egos suelen colisionar entre sí y la estabilidad pende casi siempre de un débil hilo, en esta ocasión personificado por Kirk Hammet. Así, asistiremos a los inicios de la grabación del nuevo disco (St.Anger) justo después de que Jason Newsted decidiera dejar el grupo y Hetfield y Ulrich tendrán mil y un encontronazos entre sí motivados, sobre todo, por los deseos del primero de controlarlo prácticamente todo. Kirk Hammet, paciente durante casi todo el documental (y sospecho que durante toda la carrera de Metallica), explota y se queja de la escasa posibilidad de creación que ha sufrido en los últimos años.
Contemplaremos también el ingreso de Hetfield en rehabilitación; seremos invitados de excepción durante el encuentro surrealista entre Ulrich y Dave Mustaine, a quién todavía le escuece que la banda no contara con él; y podremos ver desde dentro cómo se desarrolla el proceso de selección del nuevo bajista de la banda, audiciones incluidas. Al respecto, mencionar que el elegido fue Robert Trujillo por su forma de tocar el bajo, muy similar a la del difunto Cliff Burton, miembro original de Metallica.
Con el paso de los años, y después de reacciones diversas y muy variadas por parte de todo tipo de estamentos (prensa, aficionados, otras bandas...), Lars Ulrich comentaba hace apenas unos días que "Some Kind of Monster fue una idea estúpida". El batería de Metallica explicaba además que era plenamente consciente de que "muchos músicos han pasado por lo mismo, pero ellos no fueron tan estúpidos como para filmarlo como hicimos nosotros y compartirlo con el resto del mundo. Desde entonces, colegas y fans saben demasiado de nosotros". En parte tiene razón, ya que en el documental se vivían momentos de auténtico patetismo y desmoronamiento sentimental que no gustó a esos fans acérrimos del grupo que olvidan a las primeras de cambio que esos ídolos musicales no dejan de ser personas de carne y huesos con sus problemas, sus miserias y sus momentos de bajón. Yo, sinceramente, no creo que el documental fuera una estupidez, y Ulrich debería saber que ni se puede ni se debe ser un tipo duro todo el tiempo. Ni siquiera creo que sea buena idea el intentar aparentarlo...