Uno de los temas más complicados en los que nos enfrentamos con la productividad es decidir exactamente las tareas que debemos realizar cada día.
Lo más importante que debemos hacer es aprender a definir adecuadamente las tareas que realmente haremos.
¿Por qué digo que realmente haremos? Porque no importa el método o sistema productivo que utilicemos, diariamente tenemos tareas que debemos seleccionar para realizar y con el método que hoy presento te resultará más sencillo darte cuenta si lo que pretendes hacer es algo que realmente deba ser hecho por ti o por alguien más, o si aquello que crees que debe hacerse no es realmente una tarea que tenga razón de ser.
Para aprender a seleccionar nuestras tareas se requiere de una reflexión inicial muy sencilla que explicaré a continuación: Cada día (si se puede desde un día antes mejor) se tienen que definir las tareas a realizar durante la jornada.
En muchas ocasiones esta selección obedece a la urgencia de los temas a considerar, sin embargo, para desarrollar mejor nuestra productividad y lanzarla a lo más alto, lo que debemos hacer es implementar un método de autoanálisis, que nos permita encontrar las tareas que realmente nos permitan avanzar y darnos la oportunidad de enfocarnos en los que es importante para nosotros.
Este método de autoanálisis responde fácilmente a las presiones y a la indecisión por saber hacia dónde realmente se deben inclinar tus actividades.
Lo primero que debes hacer es ubicar una tarea, empecemos por algo sencillo: ‘Hacer el pago de la luz’.
En este caso, supongamos que no tenemos empleados y que tampoco se puede hacer el pago por internet (es mi ejemplo ¿está bien? Jajaja) Pongamos en marcha nuestro autoanálisis con la primera pregunta detonadora: “¿Lo tienes que hacer tú?”
Entonces ya que no hay empleados disponibles lo más lógico es que seas tú quien tenga que hacer la tarea, entonces va el primer ‘SI’.
Ya tenemos un ‘SI’, vamos con la segunda pregunta detonadora del análisis de tareas, “¿Tiene que ser hoy?”
Aquí vamos a suponer que tu recibo vence el día 01 del mes que viene y apenas estás a 24, por lo que ‘No’ forzosamente tendría que ser hoy, aunque bien podrías ir y pagarlo.
Por último viene la tercera pregunta detonadora del autoanálisis: “Si no lo hicieras ¿Qué pasa?”
Ya vimos que si no lo haces HOY no pasa nada, pero si no lo pagas antes del día 02 te quedas sin luz, es decir que para seguir teniendo luz debes pagar tu recibo.
Aquí nos encontramos con una tarea que si bien es Importante por la consecuencia que representa, tampoco es una tarea urgente (para hoy), sin embargo las respuestas de este primer momento nos permiten que nuestra planeación se flexibilice para poder realizar cosas que sean realmente importantes, sin embargo, esto nos debe permitir también identificar aquellas tareas que pueden convertirse en urgentes si no se atienden y sobre las cuáles debemos tener más control.
Como podrán observar, este simple y sencillo método nos permite realizar una adecuada selección con base en tres criterios muy trascendentes: Relevancia (quién lo hace), urgencia (cuándo se tiene que hacer) e importancia (cuál es la consecuencia).
Mi Análisis Realista del día de hoy es: Utilizar las preguntas detonadoras te ayudará a definir lo que realmente tienes que hacer al momento de planificar tus tareas, pruébalo y verás que simplificas en actividades que no siempre te corresponden a ti.
Omar Carreño
Imagen Lista cortesía de Shutterstock
Omar Israel Carreño RoblesSoy un abogado, bloguero y escritor de origen mexicano que en mi blog Análisis Realista he logrado plasmar ideas de productividad, desarrollo personal y minimalismo, buscando mejorar el estilo de vida de muchas personas mediante ideas que ayuden a eliminar los excesos y enfocarse en lo importante.