Mi embarazo, mi bebé y la anemia

La anemia es uno de los problemas más comunes durante el embarazo. En el post de hoy vamos a ver los síntomas más comunes para poder detectar la anemia durante el embarazo. Además de ver como debemos preparar la dieta para dejar de tenerla y como puede influir la anemia durante el embarazo, en el bebé y en la embarazada.

Los síntomas de la anemia durante el embarazo.

Cuando estamos embarazadas, aparte de los problemas normales, nos encontramos con otros curiosos. Uno de ellos, es distinguir las enfermedades o mal estares que podemos sufrir durante el periodo del embarazo.

Tengamos en cuenta que durante 9 meses, nosotras, vamos a sentir un gran número de cambios, sensaciones que nunca habíamos sentido. Con lo que uno de los retos, es conseguir identificar las molestias y dolores, para saber si de verdad estamos sufriendo una enfermedad o solamente es un síntoma normal del embarazo. Por suerte después del primer embarazo, ya nos convertimos en todas unas “expertas” y en los siguientes nos resultará mucho más fácil.

Los síntomas de la anemia, vienen marcados en función de la intensidad con la que nos haya atacado la anemia. Así por ejemplo es posible estar sufriendola y sin embargo no notar ningún síntoma extraño.

Durante todo el embarazo, estaremos sometidas a una serie de pruebas y análisis que harán un seguimiento al volumen de hemoglobina en la sangre de la mujer embarazada. Vamos que aunque no notemos ningún síntoma, el médico se encargará de hacer el seguimiento oportuno para conocer nuestro estado y niveles de hierro.

A continuación tenemos los síntomas más comunes de la falta de hierro.

La anemia es cuando sufrimos un descenso en la hemoglobina, encargada de transportar el oxigeno a todos los tejidos del cuerpo. Esto lo que provoca es un cansancio generalizado. Al no llegar suficiente oxigeno a las partes del cuerpo, el cansancio se adueñará de nosotras y además nos costará más respirar para conseguir el mismo volumen de oxigeno.

Mi bebé y la anemia.

Por lo general, la anemia durante el embarazo, no suele afectar de ninguna forma al feto. De hecho, el futuro bebé, es el primero en coger el hierro de la sangre, para cubrir sus necesidades. Y una vez que el bebé tiene su dosis, será la madre la que intente cubrir las suyas.

En el caso de que al bebé le falte su parte de hierro. Uno de los problemas que puede tener es que sufra anemia en los primeros meses, después del nacimiento del niño.

Las consecuencias durante el embarazo de la anemia, pueden ser graves. Aunque el seguimiento continuo, es muy poco probable que ocurra. Puede provocar un parto prematuro, que el niño nazca con bajo peso o incluso que el bebé nazca muerto.

Aunque hoy en día, este tipo de desenlaces no es normal que ocurran debido a una falta de hierro. Los médicos cuentan con tiempo de maniobra al detectar la anemia en la mujer embarazada.