Revista En Femenino

Mi primera cita en la Seguridad Social

Por Clara Ingeniera @mamaingeniera

Esto es algo que llevo días queriendo contar aquí, pero no me ha venido la inspiración hasta hoy mismo, y tengo ganas de compartir con vosotros mis pasos por la Sanidad Pública.

Como bien sabéis, yo tengo seguro privado y gracias a eso, hemos podido hacernos algunos análisis antes de que llevásemos un año intentando concebir. Hormonales los míos y de esperma mi marido. Aún así, y con la sospecha de mi ginecóloga de que tengo baja reserva ovárica, todavía quedan análisis importantes por hacerme, pero eso es otro tema.

Hace algunos meses me puse en contacto con mi seguro para informarme de que tratamientos de fertilidad me cubre exactamente. Su respuesta fue, dos IA’s y una FIV, pero no cubre ni la congelación, ni la medicación y otros extras que suman bastante. A todo esto, y alguna vez lo he dicho en Twitter, me paré a pensar que con las bajas probabilidades que tienen las IA’s, acabaría necesitando FIV (cosa que confirmó la ginecóloga en la última visita), y como mujer previsora vale por dos, decidí que había llegado el momento de ir a ver a mi médico de cabecera y contarle mi historia.

La visita la tuve hace un par de semanas. Mi doctora de cabecera es una mujer muy seria, pero muy profesional. Puesto que llevaba 15 ciclos de búsqueda, le dije que eran 15 meses, aunque en la realidad correspondían a 13. Ella puso en el volante que llevaba 18 meses intentando concebir.

Punto para ella.

Probablemente, otro médico tocapelotas hubiera dicho “sigue intentándolo un poco más y vuelve en unos meses, que hasta el año y medio es normal“. Con dicho volante, bajé a la recepción del mismo ambulatorio y me dieron cita con el ginecólogo del centro para el 4 de Noviembre.

Si estoy en plena estimulación con Omifín, retrasaré esta visita con el ginecólogo hasta que me encuentre en el periodo de descanso. Le llevaré todas las pruebas que me haya hecho hasta ese momento para que valore la situación y pueda derivarme a fertilidad con más rigurosidad.

Además, mi doctora de cabecera me dijo que convendría que maridín se hiciese un seminograma, así que tenía que pedir cita y solicitar un volante para el urólogo. Puesto que ya tenemos este análisis en nuestras manos, hemos obviado este paso. Si una vez en fertilidad lo solicitan de nuevo, siempre estaremos a tiempo.

Y este ha sido mi primer contacto con la Seguridad Social. De momento no hay mucho más que decir, pero quería dejarlo plasmado para no olvidar como fue.

¿Cómo fueron vuestras primeras visitas a la Seguridad Social en cuanto a fertilidad se refiere? ¡Contadme vuestras experiencias y a que debo atenerme! Cualquier consejo es bienvenido.


Mi primera cita en la Seguridad Social

Volver a la Portada de Logo Paperblog