Una de las cosas que más afectan a los que hemos tenido ciertos privilegios económicos en la vida es que realmente no tenemos un “pueblo” ni nos hemos criado en un sitio exclusivamente o ciudad. Por eso en muchos casos, para sentir algo de identidad u orgullo, tenemos que tirar de nuestros orígenes. Personalmente me identifico plenamente con mis orígenes valencianos, catalanes y gallegos (aunque también vivo más de cerca mi cultura valenciana por encima de cualquier otra) y en España, si tengo que identificarme absolutamente con algo, siempre es Valencia. Pero en toda mi vida he vivido en sitios distintos y he visto demasiado, quizá, si comparamos con el típico perfil español. En Estados Unidos, en este pueblo que se llama Weehawken (donde asesinaron cruelmente al gran héroe federalista Alexander Hamilton) es donde paso largas temporadas cada año. Sin duda, como podréis ver en las fotos (de google maps), la influencia británica y alemana es muy fuerte aquí. Cada vez que amanece gris y fresco, recuerdo por qué los colonos ingleses adoraron esta zona. Les recordaba a su tierra.
Los impuestos sobre la propiedad aquí son altísimos así como todos los impuestos en general y tasas. La seguridad, eso sí, es excelente y a cualquier hora que salgas de tu casa hay policía en cada esquina patrullando. Que sirva eso como advertencia a cualquier graciosillo que quiera hacerme daño como ocurrió el año pasado cuando la pandillita de unos españolitos de derechas pensaron que podían hacer aquí lo que les daba la gana como si estuvieran en el Madrid del PP. Serás rápidamente identificado y detenido, irás a juicio y la ley estipula penas de cárcel para los delitos de amenaza, acoso y vandalismo.
Generalmente hablando, este no es un estado donde la gente tenga muchas pistolas en casa, pero los que tenemos armas sí sabemos usarlas y la ley dice que si alguien entra en tu propiedad les puedes matar (pero no si está fuera de tu propiedad, como sí pasa en estados como Florida o Texas donde incluso se puede disparar a un ladrón que esté huyendo). En New Jersey y el noreste en general son algo más “europeos” y está prohibido dispararle a un sospechoso que huya de tu propiedad. Yo tengo bien claro una cosa: si alguien amenaza mi vida dentro de mi casa, y tiene un arma proporcional, que tenga claro que le mato. No tienes derecho a quitarle la vida a nadie durante la comisión de un delito, y por eso muchas veces no queda otra que matar al agresor. Para los europeos que no viajan, eso suena muy duro, pero aquí es un estílo de vida porque es una sociedad mucho más dura.
Weehawken tiene dos zonas: una zona está muy cerca del Río Hudson y se puede ver todo Manhattan con sus rascacielos. La otra parte, más al oeste, es pobre y tiene mayoría de origen latinoamericano viviendo en edificios de protección oficial. Hace 40 años, este pueblo era todo vecinos de origen europeo, principalmente alemán, italo-americano y algún que otro valenciano, pues uno de los primeros españoles aquí que compraron casa fue un señor valenciano. De hecho, su mansión fue convertida al estílo español, cambiando por completo la fachada antigua de estílo inglés.
Mis antepasados fueron más “originalistas” y conservaron todo lo británico de la casa, a diferencia de otros valencianos en la zona.
La mayoría de los residentes en el pueblo son liberal-progresistas y ya en los años 30, este pueblo se vendía como apto para “progressives” (o sea, progresistas) y hoy en día hay dos calles en las que viven varios vecinos homosexuales desde los años 70. Aquí nadie se escandaliza por eso, como tampoco se escandalizaron con la llegada masiva de italo-americanos en su día, a pesar de ser un barrio alemán-americano.
Por esas cosas siempre digo que me crié entre lo mejor de los dos mundos: en el anglosajón y el español. Los que tuvieron estas mismas condiciones en su juventud encajamos bien en Inglaterra o España perfectamente. Tenemos dos culturas y eso no es fácil de entender para los que solo se han criado en un entorno.
Aquí van algunas fotos: