Mi regreso de Bretaña

La casa de mis suegros Ya estoy de nuevo en casa. Menuda paliza de coche; menos mal que hemos parado cada dos o tres horas a estirar las piernas, a tomar un café, a visitar el servicio, o para comer. Pero a pesar de todo, con los paisajes tan impresionantes que encontrábamos circulando y la música sonando, la carretera se ha hecho menos pesada.  Bretaña es preciosa, aunque esta vez la visita ha sido más bien de tipo familiar y casero. Hemos pasado más tiempo en casa de mis suegros que dando paseos..... ¡ Con el frío que hacía en el exterior cualquiera se recreaba mucho tiempo dando un paseo ! .  Otras veces que he ido a Bretaña ha sido en verano, aunque allí el verano no es demasiado caluroso; pero ésta vez me ha encantado ver el paisaje totalmente diferente, con una variedad de tonos marrones, rojizos y verdes preciosos. He intentado no sobrepasarme demasiado en la comida y en la bebida y creo que lo he conseguido.........! peso incluso unos gramos menos que al irme ¡ y eso que la comida bretona es rica en grasas: pâtés, mantequillas, quesos, panes riquísimos, crêpes ............ Ha sido una Navidad agradable y mi marido ha disfrutado de la compañía de toda su familia. En fin que ya estoy de vuelta en casa y ahora toca deshacer el equipaje.........lo más pesado. Ana Hidalgo