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Mi tótem

Publicado el 27 noviembre 2018 por Gatis @gatis75

Mi tótemHace poco con los compis estuvimos hablando sobre nuestros posibles tótems y cuál debería ser el de cada uno. Yo me quedé toda pilluqui, como diría L, con el tema y, al principio, lo ví claro. Sí, sí, mi tótem es un pez. ¡Vamos! Con la memoria de mierder que tengo era esto o mosca. Otros síntomas que apoyaban mi teoría es mi empanamiento natural o mis mini ojos, pequeñitos y redonditos. Aunque, gracias a Dios, centrados en la cara y no a los lados. Ahí, como siempre, siguen mis orejas radar para captarlo todo.
Me podría pasar horas flotando, nadando en la piscina o en la playa con el solete dorando mi piel o bajo el agua caliente a chorro de clics en la ducha del gim. En una bañera con espuma hasta la nariz con música relajante, una copita de vino y un torso fornido donde apoyar la espalda. Pero teniendo en cuenta que solo dispongo de una ducha dentro de un armario de la cocina y que, lamentablemente, los torsos fornidos no se prestan a ello, pues a tomar por culo mi ideal de bañerita espumosa y me tengo que conformar, de vez en cuando, con jacuzzi compartido en el spa.
Pero el pez por naturaleza es feliciano, no tiene mal alguno y aquí... ¡Aquí ya nos distanciamos, amigo pez! ¡Adiós pescadito, adiós!
Lógica, cuadriculada, rancia de primeras. No me vengas que te bufaré, no me hagas caso y te odiaré. No discrimino y puedo ser amiga hasta de una pelusilla. Me entretengo sola con cualquier tontería. Yo, mi imaginación y poco más. Mi reino, más de una vez, por enroscarme en un rincón a soñar despierta y atenta a todo por si alguien me necesita. 
Mi tótemGenerosa con los que están a mi lado. ¿Qué quieres? ¿Un ratón? ¿Un bicho bola? ¿O mejor un buen bizcocho o unas croquetillas? ¡Dame cariño y yo te lo preparo!
Pero a los gatos el agua... Ejem, ejem. Aunque les gusta para beberla bien fresquita, el tema de hacerse unos largos en la piscina tampoco les va mucho.
Por lo que, no me queda más remedio que ser una gato-pez o un pez-gato. Pero entonces, ¿cuerpo de pez y cara de gato? ¿Una sirena gata? ¡Sexy, sexins, eh! Aunque a ver, que por todos es conocido lo mucho que les gustan a los gatos los peces. Vamos, que mi tótem se quedaría sin cola a la mínima de un solo bocao. ¡No, no! Mejor cara de pez y cuerpo de gata. ¿Sí, mejor? Esto... ¡Quita, quita! Paso de ir por ahí con cara de pez. ¿Os imagináis...?
Resumiendo y tomando todo en consignación, creo firmemente que debo ser marciana y ya está. Y, por lo tanto, lo normal sería que mi tótem fuera un alien cabezón de color de mierda de oca, como siempre me decía mi abuela cariñosamente.

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