Michel Foucault (1926-1984) hablaba sobre la "Sociedad de Control", que viene a suplantar a la "Sociedad Disciplinaria".
La vieja estructura social basada en "claustros" de encierro que regulan los hábitos y el comportamiento mediante la disciplina -la prisión, la fábrica, la escuela, el hospital- atraviesa una crisis, que según el filósofo culminará con la extinción total de esas instituciones...
La escuela ya no empieza ni termina, sino que se impone la idea de la instrucción permanente (siempre estudiando y aprendiendo).
El hospital como centro de confinamiento dió paso a medicinas preventivas y chequeos programados, y el encierro es la última opción ante los tratamientos ambulatorios... Pero dependemos y somos controlados por los "Sistemas de Salud". (Agrego que los actuales marginados de ésos sistemas ya no se aíslan en leprosarios como hace siglos, sino que permanecen libres y dispersos. A veces son claramente reconocibles, otras veces no).
La fábrica va cediendo ante "La Empresa", donde no tenemos al jefe en la nuca, y hasta podemos trabajar en casa (¡o en un bar con wi-fi!), pero la presión al fin y al cabo no es menor, sino mayor.
Llego hasta acá, ya que no quiero resumir torpemente lo que personas inteligentes se tomaron el trabajo de pensar, desarrollar y proponer... Pero traté de asociar éstas teorías al mundo de la música, o de la industria de la música... Y no me ha resultado tan difícil.
En primer lugar el "disco" como objeto delimitado que contiene música, está en evidente retroceso, al menos como se conoce desde su origen (aunque ciertos fanáticos, como vos y yo, no lo querramos aceptar).
La música no está "encerrada" en un artículo irreproducible y en cantidad limitada, sino que se transforma en bytes, se mueve por la red (gratis o no, para el caso es lo mismo) y excede el envase... No obstante se articula en una estructura mucho mayor que establece ésos límites, y controla su circulación...
Tampoco los músicos dependen de una "Institución Disciplinaria" como una compañia discográfica que modifique su arte y "sugiera" un molde más conveniente. Editan en forma independiente con absoluta libertad de decisión.
Y también graban sin tener que "encerrarse" en un costoso estudio de grabación, ya que con un adecuado software lo pueden hacer hasta en su casa... Pero para eso acceden a una sofisticada combinación de estructura y conocimientos técnicos (más "escuela", más especialización), y en definitiva las corporaciones controladoras ahora ni siquiera deben tomarse la molestia de "buscar" talentos y arriesgar en ensayos y sesiones de grabación, porque eso "viene hecho", y nada más esperan una apuesta con el resultado a la vista, para contratar al artista, promocionarlo, y hacer que ese disco no pase desapercibido entre millones (algo a lo que está condenada la mayoría restante...)
Me quedo pensando que la evolución nunca es completamente buena ni completamente mala. Pero sí es absolutamente necesaria e inevitable...