
― ¿Diga?― Hola.― Hola. ¿Quién es?― Soy Lucía.― Lucy… ¿pero tú sabes qué hora es?― Lo sé.― Dudo que lo sepas. ¿Qué ocurre?― Acabo de soñar contigo.― Y tu explicación no podía esperar a mañana, ¿no es cierto, hermanita?― No.― Puffffffffffffff ― resopló Eulalia.― He visto tu espejo.― ¿En sueños? ― espetó Eulalia en tono sarcástico y burlón.― Sí Laia, en mis sueños. ― Dijo con normalidad Lucía.
A pesar del esfuerzo de Eulalia por no estremecerse al escuchar la palabra Espejo, no pudo evitar sentir un pinchazo agudo recorriendo su columna desde el cuello hasta la parte indigna de la espalda. De nuevo visualizó aquella imagen reflejada en el espejo mientras ella se miraba de frente: aquel horripilante monstruo no podía ser ella.... Continuará ...
Les dejo el enlace al anterior capítulo pinchando en la imagen de Eulalia aquí abajo.
