Miedo a las ventas

Siempre en pláticas con amigos todos comienzan a hablar sobre las cualidades que tiene cada uno y no falta el tema del dinero, siempre escucho lo mismo “a mí me gusta más lo administrativo por que el cobrar o vender se me hace bien difícil”.
Y a mí en lo personal las ventas se me dan demasiado bien, lo aprendí al iniciar mi primer negocio el cual era la venta de playeras personalizadas. Al principio me daba mucha pena hablar con gente mayor para hacer tratos, ofrecerles mis productos, dar propuestas de negocios y así poco a poco fui aprendiendo de todo que hasta la fecha ya hasta firmo propuestas de negocios y convenios con otras pequeñas y medianas empresas.
Un ejemplo seria cuando comencé a comercializar plaquitas de identificación para perros, de esas que tienen el número del dueño y el nombre del perro. Lo novedoso que tenían mis placas es que le podías poner la foto del dueño junto con la mascota así que estaba seguro que podría vender muchas.
Para no hacer la historia más larga el dinero que mayormente entro por esas placas no fue por medio de la tienda en internet, lo que tuve que hacer fue perder el miedo de hablar con personas más grandes que yo para darles una propuesta de negocio.
Así que tome un maletín y me fui a más de 10 veterinarias para que ellos vendieran mis placas identificadoras a sus clientes.
Ya que estas hasta esta parte después de haber leído toda mi historia creo que te puedes dar cuenta que es muy normal que nos pongamos nerviosos a la hora de proponer algo o querer vender algo, por eso te diré unos pequeños tips para perder el miedo a cobrar, vender o proponer algo en cuestión de negocios.
1-   La pena no te da de comer.
Lo anterior es algo que me menciono mi madre hace tiempo y tiene mucha razón. Cuando lo único que tienes para vivir es un trabajo en el área de ventas decir “me da pena” no te sirve de nada más que para pasar hambres, así que quítate la pena a como dé lugar. Tan simple como pensar que sin ventas no hay dinero así sea la empresa que sea.
2-     No te sientas mal por uno o varios no.
 Al vender o realizar una propuesta de negocio date cuenta que así como a ti te pueden decir un no y cerrarte la puerta a ellos también se lo pudieron haber hecho ya sea en su trabajo, negocio, al pedir un favor, etc. No eres la única persona que recibe un no y un cerrón de puerta.
3-   Relájate, no des explicaciones y ve al grano.
Preparar un guion sobre lo que vas a decir solo hará que te veas robótico y no des confianza, mejor relájate no pienses en nada de lo que tienes que decir y cuando estés frente al cliente veras que las palabras fluyen solas de forma correcta y sin tantos rodeos. El verte relajado genera confianza y hace que el cliente te vea más como alguien que lo invita a probar algo nuevo y no como un vendedor agresivo e insistente.
4-    Cobrar es sencillo.
Piensa que los del banco cada que tienes una deuda te cobran y sin piedad e incluso ya casi te desalojan de tu casa. Tu caso no tiene que ser el mismo, hay maneras muy sencillas de cobrar y de forma gentil un ejemplo seria comenzar con un simple saludo, algo así como;
Hey que tal como te va?Fíjate me da pena molestarte pero quería preguntarte si ya tienes el dinero que me debías, lo que pasa es que ya lo necesito.
De la forma anterior no se ve como un cobro arrogante e incluso se escucha muy gentil.
5-   Como último y final queda esta frase.
“Da más pena el hecho de ser un inútil y no hacer nada”