Llegamos a Milán en tren. Esta ciudad ofrece todas las ventajas de una gran ciudad unidas a la comodidad que proporciona su pequeño tamaño, ya que la mayor parte de los puntos de interés se pueden recorrer a pie fácilmente. Milán es la segunda ciudad más grande de Italia por detrás de Roma, su núcleo urbano cuenta con 1,3 millones de habitantes y su área metropolitana supera los 7 millones, siendo una de las zonas más pobladas de Europa.
Lo primero que quisimos visitar era el Duomo, así llaman los italianos a sus catedrales. Esta es una enorme catedral gótica que se encuentra emplazada en el corazón de la ciudad. Es un edificio de ladrillo revestido de mármol se ve culminado con infinidad de pináculos y torres coronadas por estatuas que contemplan la ciudad. El punto más alto del templo es la estatua de cobre dorado. A nosotros nos impresionó lo grande que era y quisimos subir las empinadas escaleras para apreciar su belleza en toda su terraza. La terraza de la parte superior de la catedral ocupa prácticamente toda la superficie del tejado y desde allí pudimos apreciar la gran parte de la ciudad. Esta catedral es la catedral más grande de Italia, y el quinto más grande en el mundo.
Al bajar del Duomo decidimos ver y recorrer la Galería Vittorio Emanuele II, también conocida como " El Salón de Milán", es una galería comercial diseñada en el siglo XIX en la que se pueden encontrar, además de agradables restaurantes con terraza, las tiendas más elegantes de la ciudad. Está formado por dos arcadas perpendiculares cubiertas por una bóveda de vidrio. Estuvimos viendo tiendas de importantes firmas como Prada, Gucci o Louis Vuitton además de pequeños locales comerciales menos conocidos. Se agradeció pasear por allí ya que fuera el sol apretaba de lo lindo. Dicen que se construyo para comunicar la Piazza del Duomo con la Piazza della Scala y en poco tiempo se convirtieron en uno de los lugares más populares de Milán.
El estomago nos estaba avisando que era la hora de comer y aprovechamos un McDonals para que Lucia probara su primer happy meal. Con el estomago lleno y la comprobación de que a Lucia se le podía llevar a un McDonals emprendimos la marcha y nos dirigimos, al Castello Sforzesco. El Castillo Sforzesco fue construido como fortaleza durante el siglo XIV y es uno de los monumentos más emblemáticos de Milán. La familia Sforza tomó el Castillo y el poder de la familia Visconti y por fin Milán tuvo un periodo de paz después de muchos años de guerra contra Venecia y Florencia. Bajo el ducado Sforza la ciudad empezó el desarrollo de las ciencias, el arte y la literatura. Ludovico il Moro (Ludovico Sforza) llamó Leonardo da Vinci y el "Bramante" en su corte, donando a la ciudad toda su maravilla. En la actualidad alberga algunos de los mejores museos de la ciudad. Nosotros caminamos por el interior de sus murallas bajando la comida y Lucia aprovecho darse una siesta, pero no llegamos a entrar a ninguno de sus museos que alberga.
Ya recuperados, quisimos visitar " La Última Cena de Leonardo da Vinci". Es una de las pinturas más famosas del mundo, una enorme pintura de 460 centímetros de altura y 880 de anchura, realizada con témpera y óleo sobre una preparación de yeso, en lugar de la técnica común del fresco. Un dato curioso es que, después de tanto tiempo de dedicación a la obra, Leonardo da Vinci no cobró ni un céntimo y ni siquiera se preocupó por hacerlo. Nos dirigimos a la Santa María delle Grazie que no destaca sobre el resto de las iglesias de la ciudad si no albergara la conocidísima pintura de La Última Cena que cada día acuden a ver cientos de turistas. Pero nuestro error fue no reservar la visita al fresco, ya que las entradas estaban agotadas y lo tienen apartado de la iglesia. Así que decidimos Visitar la Iglesia y hacer un recorrido por donde antiguamente estaba el fresco.
Ya cansados nos dirigimos a la estación de tren para regresar a casa.
Consejos e información práctica
- Para viajar a Milán basta con DNI o Pasaport
- Se puede llegar por carretera, por tren o por medio de vuelos baratos que hacen trayecto a la ciudad Italiana.
- Idioma: Italiano
- Moneda : Euro
- El tipo de enchufe es el mismo que tenemos en España.
- Plano
- El metro es el medio más práctico para recorrer la ciudad, a través de sus tres líneas, las cuales son muy simples y baratas de usar. La línea roja comprende la parte norte-oeste, la línea verde para la parte sur-este y la línea amarilla la parte norte-sur. Un billete normal, tiene una validez de un viaje o de hasta 90 minutos en autobuses y tranvías y tiene un costo de 1,50 €.
Los tickets de transporte se venden en kioscos, estancos y en las maquinas expendedoras de las estaciones de metro y estación central de trenes.
- Teléfonos de interés; Policía: 113, Carabinieri: 112, Ambulancia: 118, Cuerpo de Bomberos: 115
- Con la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE) os atenderán de forma gratuita en los centros médicos de toda Italia. La tarjeta es gratuita y se obtiene en el acto en cualquier centro de la Seguridad Social. También se puede solicitar por Internet.
- La hora oficial de Italia es la misma que la de la España peninsular.
- La entrada al Duomo es gratuita, pero hay que pagar para subir al tejado (7€ a pie y 12 € si coges el ascensor). Horario: Todos los días de 07.00 a 19.00.
- Para visitar El Cenacolo ( La Última Cena de Leonardo da Vinci). En el refectorio de la Iglesia del siglo XV de Santa Maria delle Grazie, se ubica la Última Cena de Leonardo da Vinci, una de las obras maestras de la historia del arte. La magnìfica Iglesia Renacimental y el refectorio adyacente se deben a Ludovico il Moro. Precio: A partir de EUR €5.48 por persona. Esta situada en la Piazza Santa Maria delle Grazie 2, Corso Magenta Tel: 02 498 7588; reservas 02 8942 1146. Horario: El horario de apertura varía; las visitas están limitadas a 15 minutos, en grupos de 20 personas; es necesario reservar y sólo se aceptan las reservas con 60 días de antelación a la fecha de visita (no se aceptan tarjetas de crédito).
- La Galleria Vittorio Emanuele II está situada en la Piazza del Duomo y losesta abierta todos los días 24 horas (tiendas, bares y restaurantes tienen horarios diferentes).
Entrada: Gratuita. - El Museo de Arte Histórico se haya en el Castillo de Sforza además de 2 museos más ( el Museo de Artes Aplicadas que expone obras de hierro forjado, cerámicas, marfil e instrumentos musicales y el Museo Arqueológico). Horario: Todos los días de 09.30 a 17.30; museo cerrado los lunes. Entrada: Gratuita (se cobra por visitar los museos).
- Milano Card es la primera tarjeta turística de la ciudad de Milán. Cuesta sólo 6,50€ por 24 horas y 13€ por 3 días (incluso el primero) y se puede recargar. La tarjeta ofrece acceso gratuito al sistema de transporte público por 24 o 48 horas en la ciudad de Milán y descuentos para museos, monumentos, restaurantes y además en todos los otros servicios convenidos.
- Para alojarse tenemos varias recomendaciones:
Hotel Starhotel ECHO ( Viale Andrea Doria 4) al lado de la estación Central, de la parada de Terravision que viene de Bergamo, Hotel ideal, habitaciones amplias, desayuno muy bueno, trato perfecto. Muy buena atención en la recepcion.
Hotel Berna (Via Napo Torriani, 18) cerca de la estación central. Muy cómodo, ya que los autobuses del aeropuerto te dejan allí. Bien comunicado, a 50 metros del metro que te deja en el Duomo en 5 minutos. Las habitaciones son amplias y cuentan con frigobar gratis.
Restaurante Little Italy ( Via Alessandro Tadino 41) Se trata de un restaurante muy agradable. Las pizzas son muy buenas, de las mejores pizzas que puedes tomar en Milán. El personal encantador y los precios muy razonables. Siempre esta bastante lleno por lo que vale la pena reservar.
Fresco & Cimmino (via Ugo Foscolo, 4) Muy cerca del Duomo, comida muy buena. La relación precio calidad es también muy buena, el ambiente es casual y familiar. Comida casera de grandes pizzas, un lugar moderno, de grato y eficiente servicio.
- La Oficina central de turismo (APT) se sitúa en la Via Marconi 1 (esquina Piazza Duomo) y las principales atracciones turísticas son:
EL CENACOLO (Santa Maria delle Grazie)