Mira quien manda

Si alguien todavía duda que, votemos a quien votemos, cualquier gobierno de este país no solo pasa totalmente de los intereses de la ciudadanía y los generales del país, sino que está a la orden de los grandes grupos financieros que controlan tanto las empresas de servicios como la Oligarquía que domina el país desde mucho antes de montarse el simulacro de democracia, no será porque nuestros gobernantes no se empeñen en demostrarlo una y otra vez.

Primera demostración de esta semana. En el PP han dejado claro que aunque están preparando una proposición para modificar la Ley hipotecaria, en ningún caso se va a incluir en ella ningún tipo de dación en pago. Estoy convencido que van a presentar una modificación al estilo Gatopardo: “Que todo cambie para que todo siga igual”. No me extraña que el personaje que interpreta Burt Lancaster en la película y que dice esta frase sea un aristócrata antiguo súbdito del Rey de España en el sur de Italia.

Eso a pesar de que la Iniciativa Legislativa Popular presentada por la Plataforma de Afectados por las Hipotecas, al menos en lo que a dación en pago se refiere, es muy razonable, mucho más que la propuesta del PP, porque limita la dación a las hipotecas de residencia habitual. Ya expliqué en una nota del 6 de noviembre 2012 que la dación en pago generalizada y sin condiciones puede llegar a causar, y ha causado en los estados en que está vigente, grandes desequilibrios en el mercado inmobiliario. Por esto no sirve la razón que según el PP justifica su negativa a la dación: porque aumentaría el porcentaje de impagados de la banca; pero limitándola a la vivienda habitual esta razón no se daría y solo queda entonces la verdadera razón de la oposición del PP a la dación: apoyar a la banca y obedecer sus órdenes.

¿Cómo se puede tener la más mínima esperanza de que un gobierno de este país recorte sustancialmente los privilegios y métodos que utiliza la banca para abusar prácticamente sin límites de la ciudadanía si nunca lo han permitido?. Desgraciadamente, creo que tendrá que ocurrir algo muy gordo para que en este país empiecen a cambiar las cosas, porque los que nos gobiernan, a la orden de los que realmente mandan, siguen no equivocándose jamás, y lógicamente los errores los cometemos nosotros, la ciudadanía, razón por la cual no convienen ni Iniciativas Legislativas Populares,  ni referéndums,  ni consultas. Lo dije hace tiempo y cada día lo repetiré más ¡¡¡ Vive la Suisse!!!.

Por cierto. La intimidación directa a políticos es una barbaridad, pero la mejor manera de evitarla es que dejen de burlarse repetidamente de la gente, de todos nosotros.

Segunda demostración de esta semana. El partido en el gobierno que además controla el Parlamento por mayoría absoluta tiene muy avanzada una modificación tributaria que permitirá desgravar las perdidas en el juego. ¿Cómo se puede entender que en un país donde mediante recortes y aumentos de impuestos los gobiernos han puesto en serias dificultades sectores como la sanidad, la educación, la cultura y la investigación científica, estén ahora ni tan solo hablando de desgravar perdidas de juego?. ¿Cómo podemos admitir que un gobierno que parece no tener ni tiempo, ni recursos, ni ganas de acabar con los abusos a usuarios de servicios, la publicidad engañosa, la inseguridad ciudadana, la mendicidad, y un largo etcétera, si dispone de tiempo, recursos y tenga ganas de promocionar el juego regalando desgravaciones a los que se juegan los cuartos?.  Esto ya se sale del terreno del desprecio a la ciudadanía y está entrando en el del choteo, la burla y el escarnio. De todas formas es relativamente fácil entender las razones de tal barbaridad. Solo hace falta saber cuáles son los intereses financieros y personales alrededor de los casinos del país, y por supuesto del futuro EuroVegas para poder concluir con relativa facilidad quien dio la orden.

Además, desconozco cuales serán los procedimientos para poder desgravar deudas de juego, pero teniendo en cuenta que un juego tan simple como la lotería, controlado por el Estado y no por un casino, tiene ya un historial de fraudes fiscales que incluyen incluso la venta de números premiados para el blanqueo de dinero, es prácticamente seguro que esta desgravación va a ser un importante coladero y va a generar increíbles operaciones fraudulentas, pero les da igual, para ellos lo importante es cumplir las órdenes de los que mandan y que los ciudadanos de a pie reciban el palo correspondiente si se pasan.

Mientras hacen estas demostraciones de quien manda realmente en este país, se vote a quien se vote, siguen los recortes bestias sin sentido porque lo ordena la Troika, mientras en la Administración Pública nos seguimos gastando miles de millones en empleos, cargos, subvenciones y organismos  que no aportan nada de nada, y la corrupción, bien gracias.

Sobre el asunto Infanta Cristina me imagino que todos tenemos más o menos la misma opinión, solo me gustaría que alguien me contestase a una pregunta ¿Qué caray hace la Fiscalía del Estado y el fiscal anticorrupción presentando un recurso por una imputada?. Como si nuestra Justicia necesitase ni la mínima ayuda para parecerse más a una alcachofa que a un poder judicial. Y encima muchos políticos repiten constantemente que la Justicia es igual para todos. Lo menos que podrían hacer es callar. Estoy realmente muy harto de que continuamente me estén tomando por idiota. Como siempre, el dibujo de Batllori que adjunto, publicado en La Vanguardia el sábado 6, lo explica mucho mejor que yo.

Sobre nuestra familia real y en concreto la Infanta Cristina y lo campechanos y “normales” que son voy a contar algo que me ocurrió hace años. La Infanta trabaja para La Caixa desde hace mucho tiempo. Ahora tiene su despacho en el edificio central de la parte alta de la Diagonal, pero hace más de una década lo tenía en el antiguo edificio central de La Caixa en Vía Layetana justo debajo de Plaza Urquinaona, en el peor sitio de Barcelona para aparcar en la calle. Un día, justo a la mañana siguiente de haber visto en TV3 un reportaje corto sobre la “normalidad” de la vida de la Infanta entre su trabajo en La Caixa y su piso en Pedralbes,  subía a pie por Vía Layetana y vi a la Infanta aparcando su coche justo al lado de la entrada al edificio de La Caixa por Vía Layetana. De entrada pensé ‘Caray, que suerte tiene la Infanta’, pero inmediatamente me di cuenta que estaba aparcando en un espacio reservado exclusivamente para ella. Y es que son muy campechanos y no cogen el metro porque a la hora de aparcar tienen una suerte……

No tengo nada contra la monarquía, excepto quizás el dinero que nos cuestan, pero me gustaría que alguien de la Casa del Rey algún día explicase como pasa una familia real de ser una de las más pobres de Europa, como lo era la nuestra en 1975 cuando murió el dictador, a ser la segunda más rica de Europa después de la británica, en algo así como 20 años. Como que no creo en milagros me gustaría saber como lo hicieron, y quien sabe, igual tenemos un Rey que es un mago de las finanzas.  Precisamente hace pocos días se ha querido desmentir que la familia real no tenía un duro cuando murió Franco y que eran mantenidos y financiados por monárquicos desde España, al publicarse en la prensa los datos del testamento de Don Juan de Borbón que ascendía a algo más de 1.000 millones de las antiguas Ptas. (unos 6 millones de €). Solo hay un problema, Franco murió en 1975 y Don Juan en 1993, año en que la familia real, a través de los métodos que me gustaría conocer, ya tenía una más que considerable fortuna. No hay manera de que dejen de tomarnos por burros.

En mi opinión el primer Jefe de la Casa Real, el marqués de Mondejar, hizo un gran y eficaz trabajo vendiendo una imagen del Rey y su familia que, unida a la correcta actuación de sus miembros y aunque desconectada de la realidad, consiguió popularizarlos y hacerlos más que aceptables, pero los Jefes que han venido después y la actitud de varios miembros de la familia, en especial del Rey, se han cargado el buen trabajo que hizo el mencionado marques hasta llegar al actual estallido que creo justificaría un referéndum para confirmar o no la monarquía, pero esta vez sin trampas.