Revista Religión
«Yo soy el pan vivo, bajado del cielo. Si uno come de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo le voy a dar, es mi carne por la vida del mundo.»
Discutían entre sí los judíos y decían: «¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?»
Jesús les dijo: «En verdad, en verdad os digo: si no coméis la carne del Hijo del hombre, y no bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. El que come mi
Sus últimos artículos
-
El cónclave como espejo del alma: cuando la Iglesia elige, el alma también discierne
-
El adiós al Papa Francisco: Una reflexión sobre la vida, la muerte y la esperanza que no muere
-
La Resurrección de Cristo: El Misterio que Cambió Todo
-
El engaño en el camino de la Santidad y la Única Verdad que Permanece
