Cada vez hay una mayor cantidad de alertas en relación a los peligros de padecer obesidad durante la infancia a raíz de malos hábitos diarios, tanto en lo referido a la alimentación como al sedentarismo y la falta de actividad física.
Son muchos los niños que llevan una mala forma de vida apañada por sus padres, ahora se reconoce que ver la televisión durante más de ocho horas diarias y dormir menos de 10 horas al día durante la niñez son factores que aumentan hasta en un 50% los riesgos de padecer obesidad infantil.
La información se ha transmitido en el marco del X Congreso de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (Seedo) gracias a un estudio que fué llevado adelante por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) que comprobó que un 26% de los niños del país con edades correspondidas entre los 6 y los 9 años tienen sobrepeso, mientras que otro 19% sufren de obesidad infantil.
Para que los pequeños tengan una correcta nutrición es importante respetar las comidas, sobre todo el desayuno que constituye la primer fuente de energía en el día y que tiene relación directa con el desarrollo de la obesidad, con cálculosque indican que el 20% de los niños y el 35% de los adultos no desayunan, corriendo el riesgo de luego comer entre comidas y aumentar de peso.
Los padres son los respondables de promover buenas costumbres en la vida cotidiana de los niños, por ejemplo, cambiando bebidas azucaradas por agua mineral, servir a los niños porciones apropiadas de comida y repetir las correspondientes ingestas cuatro veces al día, eliminando el exceso de golosinas, frituras y comidas rápidas.
El doctor del Hospital Clínico de San Carlos de Madrid Miguel Angel Rubio, indica:
“Entre los 3 y 6 años el índice de masa corporal se predice a partir del tiempo de visionado de TV y de la actividad física, no la dieta”.
Existe también un criterio de variedad en cuanto a la alimentación, en la dieta de los niños deben estar presentes las frutas y verduras en abundancia, se debe limitar el tiempo frente a la televisión a no más de 3 horas por día, lo mismo con los juegos de video. Junto con esos cambios es primordial que los niños practiquen deportes a diario o cualquier tipo de actividad física.
Vía | Salud Ideal
Foto | telegraph
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Mirar mucha TV y dormir poco aumenta en un 50% el riesgo de obesidad infantil