
El viejo Woody Allen, ácido y corrosivo como nunca en este magnífico descenso a los infiernos, en cuyo sector español, a poco que la distribución por plantas fuera la misma, debería haber superpoblación.


El viejo Woody Allen, ácido y corrosivo como nunca en este magnífico descenso a los infiernos, en cuyo sector español, a poco que la distribución por plantas fuera la misma, debería haber superpoblación.

Música para una banda sonora vital: ¡Lumière! La aventura continúa (Lumière! L’aventure continue, Thierry Frémaux, 2024)
Sergio Leone, por Wim Wenders
Soledad, corrupción y mundos que desaparecen: Saint Jack, el rey de Singapur (Saint Jack, Peter Bogdanovich, 1979)
Palabra de Robert Morley