Muy a menudo, la comedia romántica de enredo funciona como metáfora de un tema intocable para el Hollywood de la época dorada: la lucha de clases. Esto sucede en todas las screwball comedies que emparejan a una joven y rica heredera con alguien pobre y pusilánime. Uno de los mejores ejemplos, aunque ni mucho menos el único, es esta estupenda y divertidísima comedia de Howard Hawks, uno de los grandes maestros del género (y de los géneros, en realidad).
Revista Cine
Mis escenas favoritas: La fiera de mi niña (Bringing up, Baby, Howard Hawks, 1938)
Publicado el 22 noviembre 2017 por 39escalonesSus últimos artículos
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