Modern Family: la familia en la era de la posmodernidad

Lo juro: yo no quería empezar más series nuevas. Ya con todas las que veo me alcanza y me sobra. Y, sin embargo, por circunstancias que no vienen al caso, hace muy poco me puse con Modern Family, una de las sitcoms más celebradas de los últimos años, y ya estoy completamente al día con ella. Como, en mi opinión, ninguna de las dos comedias norteamericanas que sigo (How I Met Your Mother y The Big Bang Theory) están actualmente en su mejor forma, la verdad es que ver esta serie fue como un soplo de aire fresco para mí.

Modern Family se puede resumir desde su nombre, ya que es una sitcom sobre tres familias actuales, bien “siglo XXI”: por un lado, la de Cameron (Eric Stonestreet) y Mitchell (Jesse Tyler Ferguson), una pareja gay con una hija bebé adoptada en Vietnam; por otro, la de Jay (Ed O’Neill), un hombre mayor casado con Gloria (Sofía Vergara), una treintañera colombiana madre de un niño de 11 años intelectual y sensible; por último, la de Claire (Julie Bowen), Phil (Ty Burrell), y sus tres hijos, que sería la más cercana a la familia representativa del American dream. En cada capítulo se tratan distintas cuestiones cotidianas que involucran a cada una de estas familias.

Toda esta diversidad hace a Modern Family un programa interesante que llama la atención porque logra representar en tres parejas diferentes los cambios que están ocurriendo desde hace unos cuantos años en esa institución social tan fundamental llamada “familia”. Por supuesto que no todas las familias actuales y “diferentes” son unidas como la que se presenta en la serie, pero la idea está, y es buena. Si a esto le sumamos un reparto muy parejo, un guión  bien pensado que mezcla diversas situaciones familiares con entrevistas grabadas para un falso documental, y personajes que aportan sus distintos tipos de personalidades y que, de una forma u otra, se vuelven indispensables, bingo, tenemos una muy buena comedia. Y otra cosa importante: no hay risas grabadas. Aleluya. Con el tiempo me acostumbré a estas risitas siempre presentes en la mayoría de las sitcoms, pero cuando en una no las tengo de fondo indicándome cuándo tengo que reírme y cuándo no, sinceramente me alegro.

En Modern Family se suceden desde escenas que pueden ser “como la vida misma” (como por ejemplo la madre lidiando con sus hijas adolescentes) hasta otra buena cantidad de situaciones tan exageradas como divertidas. Y si hablamos de exageración, también hay que decir que se llevan al límite los estereotipos de algunos personajes, como el de la pareja gay, el de la niña asiática, y el de la típica latina apasionada con un acento muy marcado. Menciono esto porque he leído que hubo algún que otro problema con los comentarios que se hacen en la serie acerca de Colombia y los latinos en general, pero me parece que hay que tomarlos más como una sátira que hace la serie que como a una ofensa racial.

Yo soy medio complicada con las comedias yanquis, pero la verdad es que Modern Family me gusta mucho y se me hizo adictiva desde el principio. De lo nuevo que ha salido en este género, me parece una de las mejores sin dudarlo, aunque, por supuesto, cada uno tendrá su propia opinión. Por mi parte la recomiendo, es un excelente entretenimiento.

Título original: Modern Family
País: Estados Unidos
Número de temporadas hasta el momento: 2
Número de episodios confirmados hasta el momento: 22
Fecha de emisión: 2009 – actualidad
Cadena: ABC
Creadores: Steven Levitan, Christopher Lloyd