Momentos inolvidables desde ¡Imposible! es imposible
Rumiando ansiedades, mientras el cuello toma postura de un "de aquí no me mueves". Bailando al ritmo de neuronas descompuestas de pánico y miedo que, golpeando andan a un cráneo que se antoja pequeño para cerebro que quiere salir volando o en modo retirada o en estado de avance, a pesar del torticero miedo que agarrota tripas, hasta que con un golpe seco escupes un "como" adornado como pregunta.
Si, bueno pero ¿Cómo? y desde el mismo como, otra cara, "no es posible" ¿No? si por posible, gritan mis entrañas, doy todo lo que es imaginado o soñado. Ayy vaguería innata, que lo imposible ni traerlo puedes a tu boca, ni al mismo núcleo de tus deseos. No siendo posible, no está, ni en lo más remoto de tus conocimientos.
Que no te enreden, que no te enredes. Una perdida y baja, ahora, ahora mismo que de imposibles están las cadenas echas, pero cadenas se rompen a nada que el como, termine siendo pregunta.