Monstruos de hoy – Asesinos Natos

in CineMAD / by Cesar Del Campo De Acuña / on June 7, 2013 at 5:33 pm /

CineMAD…por  César del Campo de Acuña.

Dirección: Oliver Stone.
País: Estados Unidos.
Año: 1994.
Duración: 104 minutos.
Género: Crimen, drama, thriller.
Reparto: Woody Harrelson, Juliette Lewis, Tommy Lee Jones, Robert Downey Jr., Ashley Judd, Tom Sizemore, Yared Harris, Russell Means, Rodney Dangerfield y Evan Handler.
Guión: Historia de Quentin Tarantino. Guión de David Veloz, Richard Rutowski y Oliver Stone.
Música: Brent Lewis y Trent Reznor.
Fotografía: Robert Richardson.
Montaje: Brian Berdan y Hank Corwin.
Diseño de producción: Victor Kempster.
Vestuario: Richard Hornung.
Estreno en Estados Unidos: 26 de agosto de 1994.
Estreno en España: 21 de octubre de 1994.

Monstruos de hoy – Asesinos Natos

El escritor Hugh Prather dijo en cierta ocasión: “Una reacción negativa es mejor que ninguna reacción. Preferiría que alguien me odiase a que no me viera. Al menos si me odia, no le soy indiferente” y ese pensamiento resume de manera magistral la personalidad y carrera del controvertido director norteamericano Oliver Stone. El provocador cineasta neoyorquino, famoso por su genio y  por la polémica que siempre ha rodeado su vida profesional y privada, ha vivido por y para convertirse en la pluma de los que no tienen el valor de escribir lo que piensan, en la oratoria de aquellos que temen perder su voz ante los que les juzgan y en el proyector de la evidente realidad incomoda que nos suele rodear y que nadie quiere captar. Tan discutido como venerado, Stone ha hecho de si mismo el estereotipo del “enfant terrible” hollywoodense al que no le importa pasar por encima de critica, industria e incluso publico con tal de poder contar su particular visión sobre el asunto que le obsesione momentáneamente.

Tras el fracaso, tanto como de publico y critica, de El Cielo y la tierra (película de 1993 que cerraba la trilogía sobre la guerra de Vietnam iniciada por el cineasta con Platoon en 1986 y continuada por Nacido el cuatro de Julio en 1989) un emocional, asqueados y cansado Stone decidió que para compensar las perdidas económicas de su ultima producción se lanzaría de cabeza al mercado “exploitation” con un film de acción dispuesto para arrasar las taquillas y que haría sentirse orgulloso al mismísimo Arnold Schwarzenegger. Pero como la inmensa mayoría de las ideas relativas a la creación cinematográfica, esta fue mutando durante el proceso de preproducción y reescritura del guión original hasta convertirse en una historia mucho más profunda en la que las afrentas a la cordura y a la integridad moral a las que, a juicio del director, somos constantemente sometidos por parte de los medios de comunicación, serian vengadas con una brutal, anárquica y espeluznante sátira que invita a no comulgar con la hipocresía de aquellos que comercian con el miedo y la muerte a la par que distorsionan nuestros valores y razonamientos dispensando a las monstruos de hoy el trato equivalente a una estrella de cine o televisión (como se pudo ver en menor medida en la olvidable 15 minutos de John Herzfeld).

El alo de salvajismo que imbuyo a los creadores se traslado hasta el rodaje donde Stone presiono a los actores (sin caer en ínfulas tiránicas) en pos de traspasar lo ordinario con el objeto de alcanzar lo extraordinario. El caos se convirtió en el protagonista de una cinta destinada a hacer que los espectadores piensen en como la crueldad y el morbo han invadido nuestras vidas y en como los medios, especialmente la prensa sensacionalista, lo han convertido en un circo en el que se expone una reprobable y repugnante escala de valores basada en el concepto grotescamente real del a más famoso, más importante. Blandiendo la espada de la razón, el cineasta, acuso por medio de la escalofriante historia de Mickey y Mallory Knox, a los medios de destruir nuestra cultura por medio de un film artístico destinado a un público inteligente, a un público capaz de sentir gratitud por estar ante algo tan bello a pesar de su bestial ferocidad.

Una bestial y despiadada ferocidad a la que pone cara un inconmensurable Woody Harrelson  en la que podría ser su mejor actuación junto a su celebre interpretación de Larry Flint en El escándalo de Larry Flynt (Milos Forman – 1996). Sin llegar a empequeñecer al resto del reparto, Harrelson consigue proyectar durante todo su discurso como Mickey Knox un halo de recelo, desconfianza e inhumana locura que encuentra sus orígenes en la insensibilización a la que sus padres, educación y sobre todo la televisión le han empujado. Knox es el hijo de la muerte de la cultura y el auge del sensacionalismo…un ser que esconde en su intratable ira el miedo al fracaso al que su entorno y estímulos visuales le han empujado. Harrelson se convierte en un autentico monstruo cargado de hipnótico carisma que devora la pantalla y escenifica el mensaje de la cinta con brillantez.

Preponderar la puesta en escena del actor tejano no quita en absoluto meritos al trabajo realizado por Juliette Lewis, Tommy Lee Jones, Robert Downey Jr y Tom Sizemore, interpretes que intencionadamente dieron vida a personajes desdibujados, convirtiendo en un recurso sensacional y convincente los avatares de un rodaje frenético e intenso en los que ninguno dejo de acatar con celo la visión de Stone sin dejar de proyectar la idea que ellos mismos tenían del personaje que habían confeccionado. El enfoque poco convencional que la mayoría de ellos adoptaron a la hora de ponerse ante las cámaras se convirtió en valor añadido para una historia que no sería posible sin un estado de lucidez interpretativo tan destacable como el que encontramos en la mesa de 5 patas que sostiene a Asesinos Natos a nivel artístico.

Por otro lado, la cinta es visualmente implacable y el propio entorno se convirtió en un refuerzo psicológico y en un catalizador de los estados de ánimo de los diferentes personajes. Con más de 3000 cortes Asesinos Natos, probablemente sea el film más experimental jamás realizado y aunque en ocasiones su discurso visual sea algo “excesivo”, exagerado y confuso, la fuerza e impacto de su imagen es tan arrolladora como delicada. Brian Berdan y Hank Corwin realizaron una magnifica labor en el farragoso campo de la edición y dieron alma a planos por medio de imágenes en segundo termino a escenas que en el guión técnico obedecían al continuismo de la industria en los años 90. La enérgica innovación fascino a Stone en este proyecto, lo que le llevo a convertir todos esos pequeños estímulos visuales en las transiciones idóneas para el viaje a la demencia y a la histeria al que dio vida en un momento de recuperación emocional.

Otro aspecto francamente interesante y que no me gustaría dejar de mencionar es el relativo al aspecto sonoro. Trent Reznor, líder de la banda Nine Inch Nails, vio la cinta en múltiples ocasiones para encontrar un estado musical afín a lo que la misma quería transmitir. Los temas seleccionados por Reznor ponen el acento en el aspecto visual y sugieren locura (como por ejemplo en Taboo de Peter Gabriel y Nusrat Fateh), caminos polvorientos (Waiting for the Miracle de Leonard Cohen), brutalidad (Shitlist de L7) e incluso paz y amor (Sweet Jane de Cowboy Junkies). Las piezas musicales se convierten en otro indispensable elemento de refuerzo para la transgresión visual que el film ofrece y su idoneidad para con la película se traduce en una imperecedera comunión.

Asesinos Natos fue vapuleada por la vaga desazón que el film suscitaba entre la critica especializada. Asesinos Natos fue acusada de ser un discurso anárquico y simple, más cercano a una pataleta de Oliver Stone contra los medios de comunicación que a una obra mayúscula e indispensable para su tiempo. Asesinos Natos fue una obra difícil de digerir por una industria afincada en el convencionalismo. Asesinos Natos se convirtió en uno de los últimos testimonios sorprendentes y enérgicos realizados por el escarizado director neoyorquino. Asesinos Natos es el reflejo de todos aquellos que han convertido en un oficio el alimentar a los monstruos de hoy.

Curiosidades:

• El guión original fue escrito íntegramente por Quentin Tatrantino pero fue reescrito por Stone, el productor Richard Rutowski y el guionista David Veloz. El resultado final tenía tan poco que ver con lo ideado por Tarantino que este pidió que su nombre fuera eliminado de los créditos de guión. 
• La película se rodó en 56 días pero tardo en editarse 11 meses.
• El film esta levemente influenciado por numerosos sucesos con asesinos en serie y criminales. Los personajes están basados ligeramente en Charles Starkweather y Caril Fugate spree killers que aterrorizaron el medio oeste a finales de los años 50. la entrevista que Wayne Gale (Downey Jr.) y Mickey (Harrelson) esta basada en las entrevistas entre Geraldo Rivera y Charles Manson y en la de Mike Wallace con el dictador Manuel Noriega. La escena en la que se reconstruye el asesinato de un policía al que Mickey y Mallory (Lewis) preguntan una dirección esta basada en una historia que J. Edgar Hoover contó a la prensa sobre Bonnie y Clyde para que la creciente popularidad de los criminales disminuyera a ojos de la opinión publica. La historia que Scagnetti (Sizemore) cuenta sobre como su madre fue asesinada esta basada en los asesinatos aleatorios cometidos por Charles Whitman en 1966 desde la torre de la Universidad de Texas.
• En un principio se pensó en Michael Madsen para dar vida a Mickey Knox pero la Warner buscaba a alguien con una presencia menos intimidante para el papel.
• Oliver Stone le ofreció el papel de Mallory a la cantante Tori Amos. A su vez quiso que el tema “Me and a Gun”, canción que narra la violación que sufrió Amos, sonara en cada escena en la que el personaje matara a alguien. La respuesta de Amos a la propuesta de Stone fue una sonora bofetada.
• Según Oliver Stone, el actor Rodney Dangerfield no entendió la película durante el rodaje y no entendía lo que Stone pretendía filmando, en el marco de una Sitcom de los años 50, un tema tan incomodo como es el de un padre que abusaba sexualmente de su hija. A Dangerfield, actor que hace en Asesinos Natos su primer y único papel dramático,  le resulto muy difícil dar vida al personaje pero cuando la película fue estrenada su actuación fue aclamada y considerada uno de los puntos fuertes de la cinta.
• Durante el rodaje, Juliette Lewis en realidad rompió la nariz de Tom Sizemore cuando Mallory golpea la cara de Scagnetti contra la pared.
• En la escena en la que Mickey intercambia disparos con la policía en la entrada de una farmacia empuña una Beretta 93R y una Magnum Wildey. Esta ultima arma es la misma que Charles Bronson utiliza en El Justiciero de la Noche (Michael Winner – 1985)
• Más de 150 serpientes de cascabel, tanto reales como falsas, se utilizaron para la escena en la que Mickey y Mallory caminan entre ellas. Se temió por la integridad de los actores al verse obligados a rodar cerca de animales tan peligrosos pero dado que la escena fue filmada en la noche (cuando las temperaturas en el desierto son significativamente más fría), y puesto que las serpientes (como todos los animales de sangre fría) son muy lentos cuando la temperatura desciende, la mayoría de ellas durmieron durante el rodaje de la escena.
• Durante todo el rodaje y para mantener a todo el equipo en un estado de ánimo frenético el director Oliver Stone ponía música tribal africana a todo volumen en el set de rodaje.