Atravesando el gran arco encontramos un enorme lienzo en blanco, en el que se dibujan todas las estancias de esta
maison en Melbourne
, a base de pinceladas vegetales. Colores verdosos y marrones inundan todos los rincones de la vivienda, en la que el mobiliario, conformado por la aportación de diversos estilos, se conjuga a la perfección con su arquitectura.
En particular, me gusta la abierta distribución del salón - cocina y, sobre todo, el hecho de que se utilicen plantas como elemento decorativo. Un placer para los amantes de la naturaleza.
¿Os gusta, como a mí, la fusión de la decoración árabe con el mundo vegetal?