Tu naturaleza te describe.
Tus rasgos, tus facciones.
Esa sonrisa tan real
Ese lunar que heredaste de mamá.
Ese llanto, esa sensibilidad.
Esa fuerza, esa rudeza
que te hace mujer.
Me encanta cuando bailás así,
intimidando a los desalmados,
desalmando a los tímidos.
Sos tan indescifrable
y tan encantadora
cuando exploras tu sensualidad.
Conocés tu libertad
y andás sobre ella
sin miedo,
cagándote en quienes te dijeron
que a la vida hay que andarla en punta de pie.
Vos la vivís a los saltos
y a veces te acuestas sobre ella.
A veces se te escapan carcajadas
que otras escondieron.
Gritos, que nunca se entonaron.
Te enamorás hoy,
mañana te vas
y si querés volvés.
No dejas que nadie te diga
qué podés o no hacer.