
Esta pretende ser la primera entrega de una serie de artículos, que dedicaremos a museos tales como el Británico, El Cairo o este que nos ocupa, donde nos sumergiremos en el legado mas personal y cercano, que nos dejo el Mundo Antiguo.
Hoy lo haremos de manos de Esther SF, a la cual , le estoy muy agradecido por su aportación. Española que por el 2.008, tuvo la suerte de visitar Berlín, viaje que hizo sin albergar grande expectativas y tras el cual, una vez vistos los museos de la capital, quedo enamorada de la historia. Os dejamos con sus sensaciones, esperando que muchos de los que no hayáis visitado aun este legado, tengáis la fortuna en breve de compartir la experiencia que aquí relatamos.
VIAJE A BERLIN 2.008

Ya no sé si fui a ver Berlín, a visitar a mi primo o a Nefertiti. Su belleza embauca de tal manera que ahora tengo esa duda… cuando iba en el avión no era consciente del momento indescriptible que iba a vivir. Tan solo unos minutos después de pisar tierra berlinesa recibí la noticia de que visitaríamos el Museo y ya solo deseaba ese momento. Desde que por primera vez la vi en los libros del colegio sentía una atracción especial por ella, soñaba con verla algún día.

ALTAR DE ZEUS, TRAÍDO DESDE PÉRGAMO

DETALLE DEL FRISO DEL ALTAR
La visita al Pergamon fue deslumbrante, posiblemente el mejor museo del mundo (lamentablemente no los he visto todos para estar segura) pero mejorarlo ha de ser difícil, La Puerta de Ishtar, reconstruida casi en su totalidad, el Templo de Pergamón, igualmente reconstruido; nos hace sentir pequeños por su magnificencia, su belleza, por su antigüedad…Y por fin!! El museo Egipcio, estaba nerviosa, “¿Por qué no la ponen la primera? “ Pensé, claro que ponerla en la puerta casi seria de mal gusto, pero no me entere de casi nada de lo anterior, “la cabeza verde” por ejemplo que es muy llamativa por su perfección, en fin, al menos pude hacer alguna foto.

GRABADO DE AMENOPHIS I

Durante ese instante fue mía… uff! Salí de allí arrastras, casi con las lagrimas en los ojos, de la emoción y la pena de tener que separarme de esa urna donde se guardaba miles de años de historia y una joya, más que eso, una maravilla.
Ese día fue uno de los más felices que recuerdo, además esa imagen aun fresca aliviaban las que se ven a la salida del museo, donde aun se pueden contemplar vestigios de esa otra historia que todos conocemos, la que tampoco debemos olvidar.
Tras la visita, deseaba plasmar mis impresiones y tuve valor para escribir estas pequeñas lineas ;
BERLIN
¡que gran futuro nos deparas!
Esa línea de adoquines a lo ancho nos sorprenden...ayudan...
unen lo que una vez separo dos mitades de lo incierto.
Los bloques grises nos recuerdan el posible olvido,
rincones sombríos son sus monumentos.
Suspiros de alegría porque ya paso...
murmullos en medio del caos ordenado.
Donde se habla pero no se grita,
donde se vive sin olvidar la muerte en el pasado...
Una energía callada, queda, tranquila nos genera envidia,
porque recordar sin sufrir y perdonarse perdonando es lo más difícil...
La historia antigua queda borrada...la modernidad persiste, con
la Ilusión de no repetir, con resurgir callado, orgullosamente logrado.
Ciudad siempre viva, donde nadie llora ya... la soledad agradecida
llena de libertad cada una de sus islas...
una Luz inmensa inunda los posibles vacíos.
ESTHER SF. Mayo 2.008
MUSEOS BERLIN
EL PERGAMON MUSEUM

La originalidad de este museo, inaugurado en 1930, reside principalmente en su propio concepto: el edificio no fue construido para albergar obras de arte, sino que primero se trajeron las obras de arte, y después, a su alrededor, se construyó el edificio. De esta manera, las propias maravillas, la mayor parte de ellas arquitectónicas, constituyen las paredes y las columnas de este museo.
Las zonas más destacadas de este museo son las dedicadas al Islam, Roma, Grecia y el periodo helenístico (incluyendo la ciudad de Pérgamo, que es la que da nombre al museo), y sobre todo Mesopotamia y el Próximo Oriente. Entre algunas de las obras a mencionar, se encuentran el Altar de Zeus de la ciudad de Pérgamo, la puerta del mercado romano de Mileto, las puertas de Istar de Babilonia, estatuas helenísticas, como el famoso Espinario, e incluso la Fachada de Mushatta.
IMÁGENES CEDIDAS POR ESTHER

Entrada al Pergamon Museum

Detalle de los frisos del altar Zeus de Pergamo

Maqueta con reconstrucción del altar de Pérgamo

Famoso mosaico del loro verde, encontrado cerca del altar de Pérgamo

Columnas del altar de Artemisa


Esculturas desde el griego arcaico hasta el arte romano

Escultura Helenistica

Puerta Romana del mercado de Mileto

Bella escultura romana

Santuario de Atenea, 2 siglo a.c

Reconstrucción del pasillo de la puerta de Ishtar

La puerta de Ishtar
EL AGYPTISCHES MUSEUM

La impresionante muestra incluye obras maestras de diferentes épocas, estatuas y bajorrelieves, así como trozos monumentales de arquitectura que documentan lapsos de tiempo entre el año 4000 AC y el período romano.
Otras piezas únicas son los retratos esculpidos de la familia real y miembros de la corte; uno de los trabajos más significativos es, sin lugar a dudas, la ya mencionada «Cabeza Verde de Berlín».
La monumentalidad arquitectónica egipcia se pone de manifiesto en uno de los portones del Templo de Kalabsha de 20 AC, aproximadamente, y las enormes columnas del templo de la pirámide del Rey Sahure del año 2400 AC aproximadamente.
IMÁGENES CEDIDAS POR ESTHER

Figura de pie, caminando de Per-su-Nofret, 2450-2300 a. C

Pintura mural de una tumba: Amenhotep I. madre Ahmes Nefertari

Amenhotep I, del Imperio Nuevo, 20 Dinastía

Cabeza Verde, 350 a.c

Busto de Nefertiti 1.340 A.C

Nefertiti

Gato Diosa Bastet
