Make Me Smile, de Steve Harley y los Cockney Rebel, acompaña los créditos finales de este drama musical de Todd Haynes en torno a la era del llamado glam rock en la Gran Bretaña de los años setenta del pasado siglo. Mejor como fresco que como historia, mejores sus fragmentos que el conjunto, la película destaca por su trío protagonista (Jonathan Rhys Myers, Ewan McGregor y Christian Bale, a los que hay que sumar a Toni Collette), por su rico y complejo tratamiento visual y, por supuesto, por su abundante y variada banda sonora, repleta de temas representativos del movimiento al que sirve de documento y tributo.