Nada Surf no van a cambiar el mundo de la música, y eso algo que sabemos todos desde hace bastante tiempo. Eso sí, la verdad es a que sus seguidores, entre los que me incluyo, nos da bastante igual. La banda neoyorquina sabe cómo hacernos disfrutar con sus buenas canciones de power-pop en indie-rock, y da igual que no hagan nada nuevo, ya que mientras nos sigan dejando sus buenas melodías y sus pegadizos estribillos, nos damos por satisfechos. Y en eso nunca fallan. Además, ahora se les ha unido Doug Gillard (Ex -Guided By Voices), y se han dejado llevar por lo que parece una segunda juventud, ya que hacía años que no sacaban un disco tan enérgico y fresco como este
Hace poco comentaba Matthew Caws en una entrevista, que a pesar de que siempre hacen directos enérgicos y acelerados, sus discos siempre les quedaban más tranquilos y melosos, algo que no querían que pasara en este trabajo. Para ello, se han quedado en casa – concretamente en la que tiene Daniel Lorca en Williamsbourg -, y han grabado su sexto álbum prácticamente en directo, y con la comodidad que te da el no estar pagando un estudio por horas. La jugada no les podía haber salido mejor, ya que para mi gusto, han sacado su mejor trabajo desde aquél Let Go de 2002.
The Stars Are Indifferent To Astronomy funciona, y mucho. Sus diez canciones no tienen ningún desperdicio, e incluso eso primer single que sacaron a finales del año pasado (When I Was Young) que no me hacía mucha gracia, me ha terminado gustando. Canciones como Clear Eye Clouded Mind, Waiting For Something, Looking Through y las tremendas The Moon Is Calling y No Snow On The Mountais, nos devuelven a esos Nada Surf que disfrutan haciendo himnos de power-pop para cantar y bailar en sus conciertos. Además, los medios tiempos a los que tanto se han aficionado en sus últimos trabajos, suenan más potentes y guitarreros. Como muestra esa Teenage Dreams, que mi me recuerda a la estupenda versión que hicieron del Enjoy The Silence de Depeche Mode.
La verdad es que ya me esperaba un disco así, ya que tocaron unas cuantas en la presentación acústica que pude ver hace unas semanas en Madrid, y se veía por donde iban a ir los tiros en este trabajo. Tenemos Nada Surf para rato.
7,5