Naked Flushed de Urban Decay

Después de tanto indagar y hablar sobre el contouring, me ha picado la curiosidad y he comenzado a trastear con la paleta Naked Flushed de Urban Decay.

La verdad es que el tema del contouring siempre me ha dado algo de respeto porque me daba miedo acabar con la cara de marioneta de Kim Kardashian pero, tras ver muchos tutoriales y ver en algún evento cómo los maquilladores ponéan en práctica esta técnica, pensé que por probar no perdía nada.

Y oye el resultado ha sido mejor del que esperaba aunque también puede deberse a que mi primera vez ha sido con esta paleta tan espectacular de Urban Decay

Naked Flushed es una paleta que incluye todo lo imprescindible para contornear el rostro; un bronzer, un iluminador y un colorete.

Naked Flushed Strip

El bronzer, en tono medio, es ideal para resaltar y marcar los huesos del rostro. 

Yo lo aplico haciendo un tres comenzando por la parte alta de la frente, girando hacia el pómulo y acabando en la barbilla.

También lo aplico en los laterales de la nariz para afinarla ya que mi nariz es ancha.

El iluminador tiene un tono rosado claro dorado que queda muy natural y bonito.

Lo suelo aplicar por encima del hueso del pómulo y un ligero toque en la zona de la ojera para dar luminosidad a la mirada.

Y, por último, Naked Flushed incluye un colorete en un tono rosado para dar un ligero rubor al rostro o marcar más la zona del pómulo.

Los tres poseen una textura muy sedosa que permite difuminarlos fácilmente.

Y, en cuanto al acabado, tanto el bronzer como el colorete son mates coon ligeros destellos y el iluminador tiene un toque satinado.

Desde luego, Naked Flushed ha sido todo un descubrimiento para mí.

Admito que la tenía metida en un cajón ahí abandonada a la pobre hasta que un día dije ¿por qué no probar?

Y os puedo asegurar que lo que cambia el rostro es impresionante.

Eso sí, hay que hacerlo con tiento para evitar pasarnos y difuminando bien para conseguir resaltar algunas zonas del rostro y cambiar así completamente su expresión.

Y vosotras, ¿cómo os manejais con el contouring?