La receta de hoy no es como para repetir cada semana o corremos el riesgo de comenzar 2015 como bolitas, pero como capricho puntual es riquísima!!
La base es muy sencilla, un bizcocho de naranja (en mi caso de Thermomix) que seguro que habéis comido más de una vez y un poco…o mucho chocolate. Sólo que esta vez he decidido hacer bizcochos individuales para poder servir en una merienda o a modo de postre. Yo no soy muy de turrón, así que ésta puede ser una alternativa para poner en el centro de la mesa en una de esas largas sobremesas navideñas.
Hay varias recetas, la que yo he elegido es ésta:Una naranja entera, yo tenía estas pedazos Naranjas de Ribera del Júcar que son todo sabor así que el bizcocho sin duda gana mucho. Además hará falta 250 gr de azúcar, 2 yemas, un huevo, un yogur natural o griego, 100 gr de mantequilla, 220 gr de harina, un sobre de levadura en polvo y una cucharadita de sal. Para la cobertura lo que más os guste, yo he utilizado chocolate Nestlé para postres, un poco de mantequilla y un poco de agua.
Poned en el vaso el azúcar, la naranja entera troceada (piel incluida), las yemas y el huevo y programad un minuto a velocidad 4 y 50 grados. Añadid después el aceite y el yogur y mezcladlo todo unos segundos a velocidad 4. Después hay que añadir la harina, levadura y sal y mezclar todo unos segundos a velocidad 2.
Ahora es cuando yo he elegido mi molde de porciones individuales de Lekuè que me encanta. Ya sabéis, lo de siempre, engrasad y enharinad el molde que utilicéis y verted la mezcla para introducir en el horno previamente precalentado. Con estos moldes en mi horno han bastado 30 minutos a 180 grados, pero para uno que hice mayor, tuve que dejarlo casi quince minutos más.Podéis poner la cobertura de chocolate de muchas formas. Yo he decidido hacerlo cuando el bizcocho estaba templado echando el chocolate encima y dejándolo en una zona fría hasta que solidificase. Con la cobertura ya durita, los he sacado…y a chuparse los dedos!
Muy muy rico, os lo prometo. Para mi gusto, está perfecto dejándolo en la nevera para que se ponga el chocolate muy durito y comerlo al día siguiente. El contraste con la naranja es fantástico!Ya sabéis, sin abusar. Pero una vez, es una vez.
patricia