Natillas con compota de manzana

          Este postre lo probé en una salida improvisada con amigos. Mi marido siempre buscando planes relacionados con la cultura y sobre todo con las tradiciones antiguas, quedó con una amigo para ir a fotografiar una recreación de la Guerra Civil a un pueblo cercano. Hacían una especie de museo vivo, le encanta fotografiar sobro todo los objetos antiguos y allí iba a encontrar muchos. Con motivo de la recreación los restaurantes de la zona hacían un menú especial "menú de trinchera". Había varios platos a elegir y entre los postres uno era este.             La verdad cuando lo vi en la pizarra no me sonó muy hayá, como que no me pegaba mucho la compota con las natillas. Cuando llegamos a los postres todos pidieron este, y como uno de los otros dos lo comemos muy habitualmente y el otro no era casero, sino industrial (el único, porque el bar lo recomiendo al 100%, la comida está buenísima, casera y abundante "La Fresa" en Grullo- Candamo- Asturias) pues me decidí a darle una oportunidad a las natillas.               No me arrepiento, al contrario me disculpo ante el primer pensamiento de creer que no estarían buenas. Madre mía!!!!!!!!!! hace tiempo que no probaba algo que estuviera tan sabroso. Para repetir. Peor sobre todo para intentar replicar en casa, como yo he hecho.              Lo intentáis vosotros también?????????????        Repetiréis seguro!!!!!!!

Ingredientes:200 gr de azúcar5 yemas de huevo3/4 litros de lechelimónCanelaVainilla
1/2 kg de manzana reineta100 gr de azúcar1 palo de canelaagua
Caramelo líquidoCrocanti de almendra

1. Natillas: Hervimos la leche con la corteza de limón y el palito de canela, a los 5 minutos retiramos y conservamos al calor hasta que preparemos el resto.
2. En un cazo que no sea de aluminio se echan las yemas y el azúcar, batimos bien, revolviendo con cuchara de madera y vamos echando la leche despacio en chorrito, para que las yemas no se cuajen.
3. A continuación se ponen a cocer a fuego muy lento y mejor todavía al baño María removiendo sin parar con una cuchara de madera, y siempre para el mismo lado para que no se corten.
4. Las natillas se ve que están a punto cuando en la superficie desaparece la espuma y se empaña la cuchara con una capa delgada (no las debemos dejar hervir porque si no se cortan). 
5. Se pasan por un colador y se siguen moviendo hasta que se enfríen. Además es la manera de evitar que se les forme en la superficie una capa de corteza.
6. Hacemos las compota según el siguiente enlace.
7. Una vez hecha la compota, ponemos unas cucharadas de ella en la base de una copa, rellenamos con natillas.
8. Servimos decoradas con un hilo de caramelo líquido y crocanti de almendra. Con canela o otros figuras de azúcar de las utilizadas para decorar.