Navarra y San Sebastián

MEJOR MOMENTO O FOTO DEL VIAJE:


Parque Bardenas Reales

VÍDEO RESUMEN DE LA ESCAPADA:

ITINERARIO:
- DÍA 1 (Sábado 2 marzo): Madrid - Arguedas - Olite 
- DÍA 2 (Domingo 3 marzo): Olite - Artajona - Puente de la Reina - Astitz - Lekumberri - San Sebastián 
- DÍA 3 (Lunes 4 marzo): Olite - Madrid
ALOJAMIENTO: Nos alojamos en el Hotel Rural Villavieja en Olite (c/ Villavieja 11). Un hotel moderno, limpio y muy bien situado, en el centro de Olite, a pocos pasos de famoso Castillo (Palacio Real). Además Esther, su dueña, desde el primer momento nos atendió de forma muy atenta y tuvimos varias conversaciones con ella muy agradables. Nos hizo sentir como en casa y repetiríamos sin dudarlo.  La tarifa en temporada baja es de 53 euros la habitación doble/noche, pero nosotros cogimos un pack de 2 noches que nos incluía además la entrada al Palacio Real (con visita guiada) + visita al museo del vino + visita a la iglesia de Santa María por 115 euros. Los precios de la visita guiada al Palacio Real cuestan 4.90 euros por persona, el museo del vino 3.50 y la iglesia de Santa María 1 euro, con lo que por separado nos hubiera costado 124.80 euros. Así pues, pensamos que nos salía más rentable coger el pack aunque al final, por falta de tiempo, sólo aprovechamos la entrada del Palacio Real.   

Hotel Villavieja, Olite

DÍA 1 (Sábado 2 marzo): Madrid - Arguedas - Olite

Nos levantamos, desayunamos en casa y nos pusimos en marcha. Cerca de Soria nos encontramos con bonitos paisajes nevados.

Por el camino fuimos hablando de las cosas que queríamos ver o hacer. Una de ellas era la visita al Parque Bardenas Reales, un parque natural semidesértico que nos muestra paisajes muy curiosos. Pero nuestra intención era llegar primero a Olite, sobre el mediodía, hacer el check-in en el hotel e ir a visitar el Palacio Real dejando la visita al Parque Bardenas Reales para el el lunes, antes de nuestra vuelta a casa, pero por el camino cambiamos de opinión.  El pueblo más próximo al parque es Árguedas y lo encontramos en nuestro camino, unos 45 minutos antes de llegar a Olite, nuestro destino. El parque se recorre en coche durante unas dos horas y nosotros ya llevábamos 3 horas conduciendo pero nos encontrábamos frescos así que decidimos hacer la visita en ese mismo momento para evitar el palizón el último día. Además en ese momento lucía el sol y había previsión de lluvias a partir del lunes con lo que tampoco quisimos arriesgar a quedarnos sin visita.  Para llegar al parque hay que cruzar todo el pueblo de Arguedas y seguir unos metros dirección Tudela hasta encontrar un cartel indicativo a mano izquierda.  La entrada al parque Bardenas Reales es gratuita y el horario de visita es de las 8h hasta una hora antes del anochecer, aunque el horario de atención del centro de información es de 10-14h y de 15-17h. Recomendamos acceder al centro de información ya que allí te dan un mapa, te marcan los puntos destacados a visitar, te informan de las posibles rutas a realizar y de la existencia de algunas incidencias que pueda haber en el terreno ya que se trata de una ruta por caminos de tierra. Nosotros escogimos la ruta circular común de 2h (Blanca Baja) que empieza y acaba en el mismo punto. Es la más sencilla y recomendada en caso de tener un turismo, si se dispone de un 4x4 existen otras posibilidades con las que poder disfrutar más del terreno. El camino de la ruta que hicimos está bien conservado y no hay ningún problema para ir en coche.  
 


Parque Natural Bardenas Reales

 También existe la posibilidad de realizar rutas de senderismo o en bicicleta y hay varias empresas que organizan visitas en 4x4.   Parque Bardenas Reales. Entrada desde la NA-134, km 15,1Carretera del Parque Natural, km 6Arguedas. Tel 948 830 308turismo@bardenasreales.es
Eran las 12 del mediodía y empezábamos la ruta. A pocos metros del Centro de información encontramos un mirador que nos dio una idea de las dimensiones del parque y nos dio algunas pistas de lo que veríamos a continuación.  
 

Vista panorámica del Parque Bardenas Reales desde el mirador

Parque Bardenas Reales desde el mirador

Ahora sí empezamos el circuito siguiendo las indicaciones de la pista hasta que llegamos al cuartel militar.   

Cuartel militar Bardenas Reales

  Una vez en el cuartel podemos iniciar la ruta a mano izquierda o a mano derecha, nosotros empezamos a mano izquierda para encontrarnos primero con el Cabezo de Castildetierra o chimenea, una de las dos principales atracciones del parque. Pero antes de llegar decubrimos curiosas formaciones rocosas.  

Bardenas Reales

Bardenas Reales

Seguimos conduciendo muy plácidamente, parando a cada momento y sin casi cruzarnos con ningún coche. En algunos momentos parecía que estábamos sólos en todo el parque. En poco rato llegamos al punto más deseado de la ruta, el Cabezo de Castiltierra. Fue el punto en qué más nos detuvimos a contemplar el curioso efecto de la erosión en este montículo de tierra y sus alrededores.   

Cabezo de Castiltierra o Chimenea

  

Cabezo de Castiltierra o Chimenea

  Seguimos en ruta hasta encontrar el otro punto clave del itinerario: La Pisquerra y el Rallón.   

Pisquerra

Rallón

  A las 14h nos volvíamos a encontrar en la entrada del recinto poniendo punto y final a nuestra visita al parque. Realmente las 2h nos pasaron volando. No fueron 2h seguidas, hicimos varias paradas para hacer algunas fotografías o bien para contemplar el paisaje. La ruta sin paradas se reduciría a 1h 30m aproximadamente.   Nos pusimos de nuevo en ruta para completar los 45 minutos que nos faltaban para llegar a Olite y sobre esta previsión llegamos al hotel sobre las 14.45h. Hicimos el check-in y nos fuimos rápidamente en busca de un restaurante para comer porque estábamos ya bastante hambrientos. Nos dejamos guiar por Esther, la dueña del hotel, y decidimos probar en el restaurante El Preboste (rua Mirapies, 8) que ella nos había recomendado. Estaba bastante lleno pero encontramos una mesita. Durante el fin de semana tienen un menú de 22 euros por persona que incluye dos platos + postre o café + la bebida (vino, agua, etc.). Comimos bien, a lo mejor los camareros podían haber sido un poco más simpáticos, pero no tenemos queja. La verdad es que creemos que había poco personal para la cantidad de gente que llenaba el local e iban un poco desbordados.   

Restaurante el Preboste, Olite.

  Salimos del restaurante un poco antes de las 16h, la hora justa para empezar la visita guiada al Palacio Real. Al hacer el check-in en el hotel Esther nos dio las entradas que teníamos que canjear a la entrada del Palacio Real y así lo hicimos. Nos dieron una pegatina verde para pegarnos en el jersey y tenernos controlados y empezamos la visita.   

Olite

  

Palacio Real, Olite

La visita guiada duró unos 45 minutos y nos sirvió para conocer, entre otras cosas, que la construcción de este castillo fue ordenada por Leonor y el rey Carlos III en 1399 haciendo alarde de una gran creatividad y derroche económico. La foto superior izquierda de la composición que adjunto a continuación pertenece a un conjunto de arcos que formaban una habitación vacía que se construyó para servir de sustento del jardín colgante que la reina quiso construirse en la terraza de su habitación (foto central superior). Pero esta no fue la única excentricidad que se permitieron ya que, entre otras, mandaron hacer tantas habitaciones como días del año y pidieron como animales de compañía: leones, un lobo cerval, un camello, varios gamos, un avestruz, jabalíes, una jirafa, un papagayo y varios búfalos. La foto inferior izquierda pertenece al ala destinado a uno de los hijos, mientras que en la foto central de la parte inferior vemos un pozo de hielo.   

Detalles del Palacio Real, Olite

Una vez finalizada la visita estuvimos un buen rato paseando por los distintos pasillos y torres del castillo.

Palacio Real, Olite

Palacio Real, Olite

Palacio Real, Olite

Palacio Real, Olite

  A la salida de la visita nos fuimos a dar una vuelta por los alredores para conocer el resto del pueblo de Olite que nos pareció encantador. Al salir del castillo nos encontramos con la Plaza Carlos III desde la que se obtienen bonitas vistas del Palacio Real. A partir de aquí, descubriremos el casco antiguo con la mayoría de calles adoquinadas, con soportales que hacen un paseo muy agradable.   

Olite

  

Olite

  

Iglesia Santa María, Olite

  

Olite

  

Ronda del Castillo y Palacio Real, Olite

  El día ya no dio mucho más de sí. Un último paseo para ver el castillo desde otro punto de vista y al hotel a descansar un poco. Debo decir que salimos por la noche para ver el castillo iluminado y ¡no tiene iluminación! Nos decepcionó un poco, se lo comentamos a Esther a la mañana siguiente y nos dijo que son los estragos de la crisis. De hecho, iluminación tiene pero no la ponen por una cuestión económica. En fin, esperemos que la crisis pase y el ayuntamiento se pueda permitir encender las luces para poder mostrar este fabuloso castillo de día y de noche.  
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