LA VIDENTE
Un joven judío fue a visitar a una vidente. Ella le cogió la mano y le dijo:
- ¡Ay, ay, ay! ¡Es más bien triste!... Hasta los treinta años, no veo más que cosas terribles... Sí, hasta los treinta años su vida será un infierno.
- Bueno -respondió el judío-. ¿Y después de los treinta?
- Después de los treinta, se acostumbrará.
J.J. Fdida (compilador). Cuentos de los sabios judíos, cristianos y musulmanes. Barcelona; Paidós: 2007.
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