Junto con la creencia errónea de que el lenguaje solo estaba en el hemisferio izquierdo y las habilidades espaciales en el derecho, algunos sugirieron que la creatividad (algo que depende del imaginario espacial) también debe ser una función del hemisferio derecho. Esto fue alimentado por múltiples ilustraciones que muestran el hemisferio derecho con un arco iris junto a un hemisferio izquierdo cuadrado, lleno de cálculos.
En qué hemisferio del cerebro se encuentra la creatividad ha sido una pregunta de cientos de años. Después del Premio Nobel de Sperry en 1981, los investigadores se apresuraron por identificar exactamente qué funciones cerebrales hacen cada cosa. El artículo de Harpaz de 1990 «Asimetría de las funciones hemisféricas y la creatividad: un examen empírico,» citaba estudios de los años sesenta y setenta. Harpaz declaró que el hemisferio derecho «parece ser dominante en funciones sintéticas, no verbales, completas, unitarias, espaciales y dependientes del tiempo» y, por lo tanto, era responsable de la creatividad (Harpaz, 1990). Después de 1981, los investigadores pasaron la próxima década apuntalando los argumentos a favor de la creatividad en el cerebro derecho, solo para ser desafiados por diferentes definiciones de creatividad y mejores imágenes que muestran su alcance más amplio y múltiples redes complejas.
De dónde viene el mito
El mito del «cerebro derecho creativo” proviene de las afirmaciones que sostienen que la ciencia, las matemáticas y el pensamiento lógico se encuentran en el hemisferio izquierdo, y la creatividad en el derecho, que a su vez nació del trabajo (ganador de un Premio Nobel) de Sperry en 1981 sobre la lateralización del cerebro. Hasta hace poco, las mediciones imprecisas realizadas por la tecnología de imágenes cerebrales en la década de 1990 y principios de la década de 2000 condujeron a la promoción de este mito.
Lo que sabemos ahora
La comprensión más actual de la creatividad es mucho más amplia e involucra múltiples funciones y estructuras cerebrales, así como diferentes neurotransmisores. Según los estudios de Heilman, la innovación requiere desconexión y pensamiento divergente mediado principalmente por redes frontales. Las personas creativas a menudo toman riesgos y buscan novedades, comportamientos que activan su sistema de recompensa estriatal ventral. La innovación también requiere un pensamiento asociativo y convergente, actividades que dependen de la integración de redes altamente distribuidas. Las personas a menudo son más creativas cuando se encuentran en estados mentales asociados con niveles reducidos de noradrenalina cerebral, lo que puede mejorar la comunicación entre redes distribuidas (Heilman, Nadeau, & Beversdorf, 2003) (Heilman, 2016) (Leon, Altmann, Abrams, Rothi, & Heilman, 2014) (Valeria Drago et al., 2011) (V. Drago, Foster, Skidmore, & Heilman, 2009) (Gansler et al., 2011) (Heilman & Acosta, 2013).
Artículo relacionado:Beneficios de la formación musicalLa creatividad también se está estudiando en relación con la red de modo predeterminado, o las formas en que el cerebro está activo cuando está en reposo. Beaty y sus colegas «sugieren que la capacidad de generar ideas creativas se caracteriza por una mayor conectividad funcional entre la corteza prefrontal inferior y la red predeterminada, lo que apunta a una mayor cooperación entre las regiones del cerebro asociadas con el control cognitivo y los procesos imaginativos de bajo nivel.» Esto significa que la creatividad no se limita a las funciones del hemisferio derecho y puede no estar relacionada con el conjunto de habilidades «activas», sino con lo que hace el cerebro cuando no está enfocado en nada en particular (Beaty et al., 2014).
La creatividad, como la inteligencia, es un proceso mental extremadamente complejo. La localización en el cerebro solo se puede hacer decidiendo primero a qué teoría de la creatividad adherís, luego desglosando la creatividad en sus muchos subelementos (desconexión, pensamiento divergente, toma de riesgos, búsqueda de novedades, pensamiento asociativo y convergente, control cognitivo, y procesos imaginativos, entre otros) y mediante la identificación de estudios que establecen cada una de estas redes neuronales. Esta es una tarea monumental que aún no se ha emprendido.
Referencias:
Beaty, R. E., Benedek, M., Wilkins, R. W., Jauk, E., Fink, A., Silvia, P. J., … Neubauer, A. C. (2014). Creativity and the default network: A functional connectivity analysis of the creative brain at rest. Neuropsychologia, 64, 92-98. https://doi.org/10.1016/j.neuropsychologia.2014.09.019
Artículo relacionado:El cerebro humano tendría una especial preferencia por el tono musicalDrago, V., Foster, P. S., Heilman, K. M., Aricò, D., Williamson, J., Montagna, P., & Ferri, R. (2011). Cyclic alternating pattern in sleep and its relationship to creativity. Sleep Medicine, 12(4), 361-366. https://doi.org/10.1016/j.sleep.2010.11.009
Drago, V., Foster, P. S., Skidmore, F. M., & Heilman, K. M. (2009). Creativity in Parkinson’s disease as a function of right versus left hemibody onset. Journal of the neurological sciences, 276(1), 179-183. https://doi.org/10.1016/j.jns.2008.09.026
Gansler, D. A., Moore, D. W., Susmaras, T. M., Jerram, M. W., Sousa, J., & Heilman, K. M. (2011). Cortical morphology of visual creativity. Neuropsychologia, 49(9), 2527-2532. https://doi.org/10.1016/j.neuropsychologia.2011.05.001
Harpaz, I. (1990). Asymmetry of Hemispheric Functions and Creativity: An Empirical Examination*. The Journal of Creative Behavior, Vol. 24, pp. 161-170. https://doi.org/10.1002/j.2162-6057.1990.tb00538.x
Heilman, K. M. (2016). Possible Brain Mechanisms of Creativity. Archives of Clinical Neuropsychology: The Official Journal of the National Academy of Neuropsychologists, 31(4), 285-296. https://doi.org/10.1093/arclin/acw009
Heilman, K. M., & Acosta, L. M. (2013). Visual artistic creativity and the brain. Progress in Brain Research, 204, 19-43. https://doi.org/10.1016/B978-0-444-63287-6.00002-6
Heilman, K. M., Nadeau, S. E., & Beversdorf, D. O. (2003). Creative innovation: possible brain mechanisms. Neurocase, 9(5), 369-379. https://doi.org/10.1076/neur.9.5.369.16553
Leon, S. A., Altmann, L. J., Abrams, L., Rothi, L. J. G., & Heilman, K. M. (2014). Divergent Task Performance in Older Adults: Declarative Memory or Creative Potential? Creativity Research Journal, 26(1), 21-29. https://doi.org/10.1080/10400419.2014.873657
Fuente: PsychCentral
Artículos recomendados:
- Neuromito: usamos sólo el 10% de nuestros cerebros
- La música podría ayudar al desarrollo de los cerebros de bebés prematuros
- ¿Cómo afectan al cerebro los alimentos que consumimos?
- El mito del cerebro reptiliano
- La científica que usa luz para tratar el Alzheimer