Sábado 7 de Marzo de 2015
El Telescopio Espacial Hubble ha obtenido imágenes de la nebulosa planetaria NGC 6369. Este objeto es conocido por los astrónomos aficionados como la "Nebulosa del Pequeño Fantasma", porque aparece como una pequeña nube, fantasmal que rodea la débil y agonizante estrella central. NGC 6369 se encuentra en la dirección de la constelación de Ofiuco, a una distancia estimada entre unos 2.000 y 5.000 años luz de la Tierra.
Cuando una estrella con una masa similar a la de nuestro Sol se acerca al final de su vida útil, se expande en tamaño a convertirse en una gigante roja. La etapa de gigante roja termina cuando la estrella expulsa sus capas exteriores hacia el espacio, produciendo una nebulosa que resplandece débilmente. Los astrónomos llaman al objeto nebulosa planetaria, porque su forma redonda se asemeja a la de un planeta cuando se ve con un pequeño telescopio.
El núcleo estelar remanente en el centro está enviando un torrente de luz ultravioleta (UV) en el gas circundante. El prominente anillo azul verdoso, de casi un año luz de diámetro, marca el lugar donde la luz ultravioleta energética ha despojado a los electrones de los átomos en el gas. Este proceso se llama ionización. En el gas es más rojo cuanto mayores son las distancias a la estrella, donde la luz UV es menos intensa y el proceso de ionización es menos avanzado. Aún más al exterior del cuerpo principal de la nebulosa, se pueden ver columnas de gas más tenues despadidas de la estrella en el inicio del proceso de expulsión.
Nuestro propio Sol puede crear una nebulosa similar, pero no por otros 5 millones de años. El gas se expandirá lejos de la estrella a unos 15 kilómetros por segundo, disipándose hacia el espacio interestelar al cabo de unos 10.000 años. Después de eso, la brasa estelar remanente en el centro se enfriará gradualmente durante miles de millones de años como una pequeña estrella enana blanca.
Fotografía original
Crédito: NASA y Hubble Heritage ( STScI / AURA )