Las relaciones que he mencionado son sugerencias para explorar, pero aquí no necesitamos desarrollar más estos puntos. Baste observar que lo que las personas llaman “ley científica” es en realidad una manifestación de lo divino. Estamos hablando de Dios mismo y la revelación de sí mismo por medio de su gobierno del mundo. Los científicos deben creer en las leyes científicas para poder realizar sus labores. Y cuando analizamos lo que es esta ley científica, encontramos que el científico está confrontado con Dios mismo, el Dios trino, y dependemos de él constantemente y de lo que hace en conformidad con su naturaleza divina.

