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Publicado el 30 enero 2014 por Sasa

NO HAY POST

Luce un invierno como traído de fuera, más frío que el nuestro, mucho más. Sumergida de cuerpo entero en el sofá, me quedo embobada mirando cómo el puntero del ordenador parpadea del lado izquierdo de una página por estrenar. Nos miramos, pero yo no parpadeo. Es apenas un instante sólo superado en intensidad por una descarga eléctrica o un orgasmo....si sobrevives. Yo nunca sobrevivo, nunca he sido tomada por ningún exabrupto literario, nunca he estado cerca de “eso”, nunca he escrito la palabra fin.
Otro día. Tal vez otro día sea capaz. Por lo pronto hoy estoy aquí, tecleando esto y rodeada de los cacharros que recogen el ritmo de las goteras, al tiempo que el viento marca el compás…agradezco el hilo musical.
Necesito una idea. Hay que ver que palabra tan simple y chiquitita para lo más complejo. ¡Cómo carajo se hará eso! – y digo carajo porque he decidido no usar partes del cuerpo femenino para maldecir, sea o no en vano-. Cosas del respeto.
Sé, y no porque me lo hayan contado, que hay quien escribe sin tener idea y que también hay quien, aún teniéndola, no tiene ni idea de cómo expresarla; mi sitio está en el limbo de la concepción. Lo que sí es seguro es que es más fácil tenerlas si tu cerebro no se resiste a cambiar de muebles de vez en cuando para no quedar mortalmente desfasado y cederle la vivienda a las termitas.
Una idea es un universo o muchos universos, es caos o es método, es posibilidad y es hecho, es todo y es nada, es poder. Y yo por poder ni me caso ni me embargo, que me va la vida en ello. Por eso ahora…estoy así, mirando a mi alrededor como la que está de visita en una casa por primera vez, descubriendo, observándolo todo minuciosamente, pero con el descaro que me permite ser quien vive aquí; buscando algo, por menudo que sea, mejor si es algo estúpido o común (que las historias surrealistas son las mejores, como las que escribe el genio Millás), algo que me saque, que me coloque en el lugar que coincide con mi corazón o, peor aún, con mi imaginación. Tiene que ocurrir, pero, hoy no… tal vez otro día. Lo siento, no hay post.

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