El ser humano es como la langosta, va expandiéndose, ocupándolo todo, cargándose la selva, construyendo autopistas, eliminando la vega. ¿Necesitamos tanto espacio? Los indios se conformaban con sus tiendas de campaña, nosotros necesitamos palacios. Muchos metros cuadrados para llenarlos de objetos, que luego limpiamos y cuidamos, y así no tenemos tiempo para nosotros mismos y para los nuestros. Y vamos acaparando y extendiéndonos. Y siempre deseamos más. ¿Eso nos hace felices?
El 14º consejo de Gurdjieff para su hija fue:
No ocupes demasiado espacio
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