Refugiados japoneses y libios, cruzando fronteras
Europa y Estados Unidos se preparan para echar agua sobre la calenturienta ofensiva de Gadafi en Libia, mientras el G7 trata de contener la subida del yen y el Gobierno nipón la temperatura de los reactores de Fukushima. Japón y Libia, Libia y Japón, titulares intercambiables en este día y cada uno de ellos luchando contra sus olas, tras el terremoto y posterior tsunami. De Hiroshima y Nagasaki a Fukushima, de Madrid a Bengasi… La historia se repite en una espiral interminable, siempre dando vueltas como un hamster en la rueda corriendo hacia ninguna parte. Ya no quedan territorios de frontera que explorar, ¿o quizá transitamos un día por él sin darnos cuenta? Sea como sea, vamos a sudar…