Pues navegando por la web encontré esta receta en varias página, pero hice las medidas a mi aire, improvisando. Unas le añadían algas para que tuviera sabor a “mar“ pero a mi como que no me entusiasmaba la idea.Sin embargo era pensar en el ajo, el perejil y el aceite y mi papilas gustativas se ponían a trabajar.
Para preparar esta receta necesitamos un calabacín bien fresco, vinagre (yo uso de manzana), aceite de oliva (yo le pongo un aceite virgen pero suave, que no predomine el sabor a aceite), 3 dientes de ajo pelados y troceados pequeños y perejil fresco picado.
También es útil tener una mandolina en casa para que nos salgan tiras finas y regulares, pero si no tienes lo puedes cortar con un pelador de patatas o a las malas si tampoco tienes con mucho pulso y un cuchillo afilado corta tiras de grosor similar.
Como las tiras se me quedaban un poco anchas las he cortado por la mitad. Las colocamos en un tupper.
Para marinar las tiras de calabacín necesitaremos la misma medida de agua que de vinagre.
Cubrimos las tiras y dejamos el tupper cerrado en la nevera durante 4 horas mínimo.
Una vez pasado ese tiempo escurrimos el líquido.
Y los cubrimos con aceite de oliva, los ajos y el perejil. Cerramos el tupper otra vez y a la nevera otras 4 horas mínimo (están mejor de un día para otro)
Una vez pasado ese tiempo tenemos nuestras tiras de calabacín a la vinagre (o noquerones como se les llama por la red)
Tan sólo tienes que empezar a pinchar comer o disfrutar. El aceite que nos queda en el tupper no se tira ¿eh?, es perfecto para aliñar ensaladas o para hacer unos champiñones a la plancha.
Espero que os haya gustado esta veggie-receta!!
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