¡no te comas las uñas!

El mal hábito de morderse las uñas no tiene edad, sexo ni condición social.

Suele empeorarse en situaciones de estrés y para algunas personas es algo imposible de dejar, pues están tan acostumbradas a hacerlo que sienten que es parte de ellos mismos, sin embargo sigue siendo un hábito que daña a las uñas, al estómago (en caso de comérselas con todo y esmalte) y no deja de ser una herramienta de terapia mental, así como un niño que depende de su osito de peluche para dormir.

Aquí te dejo 5 tips para que dejes el hábito

1. Si no te pintas las uñas, hazlo. 

Para muchas, el sabor del esmalte puede ser un elemento que no te agrade probar y te ayudará a no morderlas. Puedes utilizar un esmalte de ajo que propicie el crecimiento de las uñas y al mismo tiempo las alejará de tu boca por el sabor. 

2. Frota las uñas con aceite vegetal o de oliva. 

Además de que favorece su crecimiento, a la mayoría de la gente no le agrada, por lo que es menos probable que te muerdas las uñas.

3. Busca un sustituto. 

Cuando notes que te vas a empezar a comer las uñas, cómete un chicle sin azúcar, los que no te harán subir de peso y ayudarán a tus uñas a ser salvadas de los terribles dientes.

4. Pide ayuda. 

Dile a tus amigas, a tu marido, a todos los que te rodeas que te muerdes las uñas y quieres dejar de hacerlo y que cuando te vean haciéndolo, te quiten la mano de la boca.

5. Si todo falla, recurre a las postizas. 

Ponerte uñas artificiales te ayudarán a no poder comerte las tuyas, pues el plástico es casi imposible de que te lo acabes con los dientes. Recuerda ponerte un diseño simple si es que no quieres que le huyan a tus uñas.

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