Porque como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches.
Por desgracia no se debería olvidar que no todo es tan santo como parece, podríamos hacer algún cartel demagógico como suele hacer la ICAR, pero me voy a contener y simplemente voy a recomendar que no se nos olvide la colección de acusaciones y abusos sexuales demostrados que parte de la Iglesia Católica ha realizado. Y ahora si se tiene cuerpo, salgase de procesión.
Ismael Pérez Fernández.