Revista Diario
La tarjeta esta arriba de la mesa, iluminada por la misma lámpara del ambiente. Dudo en llamar por teléfono, tampoco se si será buena idea escribir un correo. Falta poco para las 21.00 y no quiero arruinar la salida con las chicas, termino de pasarme un poco de base mientras camino hasta la habitación para verme que tal estoy. Llevo puesta una falda floreada con fondo negro, que me llega casi hasta el muslo, unas sandalias de taco alto en color marrón, una camiseta negra clásica con un cuello redondo bastante profundo y para estar a temperatura normal, llevo mi blazer negro. Me estoy olvidando de ponerme mi colgante y sin aros, siempre tengo mala suerte con los aros y termino perdiendo alguno. Me miro de nuevo al espejo, puedo verme de pies a cabeza doy una vuelta y chequeo que todo este bien. Realmente esta imagen merece una foto, agarro el celular que esta sobre la cama y mientras carga la aplicación para la foto empiezo a poner caras graciosas. Ya estoy para disparar la primera foto, se escucha el clic cuando termina de sacar la foto. Realmente salió muy buena, me saco dos mas para tenerlas guardadas. Todavía me falta guardar algunas cosas en la cartera. Me apresuro un poco, guardo el celular un mini set de maquillaje, billetera y creo estar lista para esperar a Regina y Mailen. Apago las luces de la habitación, le hecho un vistazo a todo para controlar que no deje nada prendido o perdiendo. Camino hasta la puerta para ir rumbo al ascensor. Cierro todo con llave, mis pasos suenan fuerte en el edificio. Aprieto el botón para llamar al ascensor que esta en el 8 piso. Tarda en bajar. Cuando llega al 4º abro la puerta y para mi sorpresa ¡subieron las chicas! -EY! Coincidencia! Que guapa estas Penélope -Gracias Regina, ustedes también se ven muy lindas –Las abrazo y las saludo con un beso a ambas -Bueno, no las presente, ella es Mailen mi compañera de piso –Señala a Mailen que me vuelve a abrazar -Un gusto Mailen!. Espero que el lugar que hayas elegido sea bueno eh! –desafiándola de una forma graciosa -Pues claro que lo es, no te arrepentirás de haber ido. Vamos a tomarnos un taxi que está en la puerta esperándonos, así llegamos más rápido y no se nos rompe nada en el camino –nos reímos juntas Ya estamos en PB caminamos hasta la puerta de calle, no tardamos mucho en subirlos, el chofer está escuchando una radio, baja un poco el volumen y Mailen le dice al chofer - Por favor, hasta Costantino Nigra 33, Nice Club. -OK –observa por el retrovisor la cara de las tres y pone toda su atención en llevarnos por el camino más directo. -¿Estas lista para divertirte esta noche? Además del cóctel, después el lugar se llena de gente por el boliche, así que vamos a estar un largo rato bailando y tomando buenos tragos –me trasmite su emoción Regina -Claro que si. Estoy dispuesta a todo esta noche! Entre risas y algunas fotos que nos sacamos dentro del taxi, el chofer indica que ya hemos llegado, Regina es la que paga el taxi y antes de que quiera entregarle la plata me dice -La vuelta, la pagas tú. –riéndose- -Ok, la vuelta será mía entonces –les guiño el ojo mientras abrimos ambas puertas para bajar.
El lugar esta colmado de gente, por suerte Mailén había hecho la reserva. Tiene una muy buena decoración. La recepcionista del lugar nos acompaña a nuestra mesa ubicada en el segundo piso, hay música de fondo y la mayoría de las mesas están ocupadas. Nuestro lugar tiene una vista amplia, yo me ubico frente a Regina y Mailen.
-La verdad que una excelente elección para esta noche –digo contenta
-Me alegro que te guste, es uno de los que más nos gusto desde que estamos acá. Se acerca el mozo para tomarnos el pedido.
-Buenas noches señoritas ¿Qué van a tomar?
-¿Les parece una cerveza para cada una para empezar? –pregunta Regina En coro respondemos con Mailen
-Si!!
Mientras el mozo se retira con el pedido de la bebida, nosotras nos ponemos a charlar para conocernos más.
-A ver, empiezo yo a preguntar. ¿Qué tal las trata Italia? –Pregunto
-Por suerte, tenemos un trabajo estable y podemos vivir tranquilas. Últimamente esta muy complicado todo el continente europeo, pero nosotras no podemos quejarnos. –Regina le guiña el ojo a Mailen
-¿Y tú guapa que nos cuentas? –Mailen se apresura a preguntar
-Llegar a Italia para mí fue todo un desafío. En una semana tuve que preparar valijas, despedirme de mis amistades y cuando me acorde, ya estaba volando en el avión. Realmente no había venido nunca a Italia, pero me di cuenta desde el primer día que pise tierra que tuve esa sensación de conocer este lugar desde siempre. Por suerte mi trabajo es algo que me apasiona, muy poca gente se dedica a lo que realmente le gusta. Y siento que es un privilegio este lugar que tuve y en una empresa mundialmente conocida. –me florece una melancolía extraña cuando hablo, pero contengo mis lagrimas
El mozo interrumpe con las cervezas, nos sirve un poco a cada una y deja un popurrí de snacks para acompañar. Cuando se retira, Mailen alza su copa
-Pues, entonces brindemos por esta nueva amistad, nueva vida y por la felicidad plena La seguimos con Regina. Damos un buen sorbo y nos echamos a reír
-Este lugar es muy conocido aquí en Italia. Hay presentaciones, concursos con premios, además de la música, creo que nos vamos a divertir mucho –Ya está alegre Mailen, eso que solo tomo a penas un poco de cerveza-
-Video institucional del boliche Nice Club - Credito para: http://www.aperitivoroma.com/