Norberta; Traspasar los perjuicios del Amor

Escrito por John Doe

Norberto, un ladrón de gasolineras y pequeñas tiendas de barrio de la tercera edad, empieza a descubrir su propia identidad de género. Cuando intenta vivir como lo que siente no sienta bien a parte de sus seres queridos. Norberta; Traspasar los perjuicios del Amor Tras su paso por el terror y el misterio, la directora Sonia Escolano se une a la script y editora de sonido Belén López Albert, que debuta en la dirección, para estrenar en nuestras pantallas un agradable drama sobre la transexualidad en la edad adulta, “Norberta” (2024).Entramos a ver “Norberta” con nuestras reservas. Tratar la transexualidad, más en la edad adulta o la tercera edad, y hacerlo en tono cómico, es un tópico muy sensible y complicado. Por suerte, la directora Sonia Escolano, que también firma el guion, consigue darnos un relato dramático con el toque de comedia justa para ser entrañable. “Noberta” no esconde querer ser un drama cómico sobre la comprensión y aceptación del colectivo trans en la sociedad adulta.

El toque de hacer los protagonistas del film ladrones de la tercera edad que atracan pequeñas tiendas y gasolineras de barrio es un punto muy fresco y divertido. Quizás la exposición se alarga un poco, pero cuando empieza el conflicto central de la cinta se toma su tiempo para desarrollarse, cosa que se agradece. Desde el principio se puede adivinar que el público objetivo del film es un público adulto que conoce la transexualidad un poco por encima y el guion no esconde que se hagan chistes, sin llegar a ofender, con la comprensión de la misma, el no-binarismo e incluso las relaciones no-monógamas. Norberta; Traspasar los perjuicios del Amor

Norberta; Traspasar los perjuicios del Amor

“Norberta” busca hacer pasar un buen rato al espectador a la vez que quiere acercarle un poco a la compresión del colectivo LGBT+. Por desgracia, al tener un público objetivo tan claro hace que algunas bromas y situaciones sean algo incómodas para la gente que es más cercana al colectivo o tiene una mejor compresión del mismo, aunque siempre intenta tratar la temática con respeto. Otra cosa que chirría del guion es la inclusión de la actriz Ángeles Ortega como una prostituta trans que ayuda a Norberta a descubrir su identidad. El concepto funciona a la perfección, pero el hacer la única actriz transexual, y que actúa como mentora de la protagonista, una prostituta es un concepto sobre las mujeres trans que se ha explotado demasiadas veces en el Séptimo Arte y se hubiera agradecido que desbancara uno de los tópicos más recurrentes para el colectivo.

El veterano actor Luis Bermejo, a quién conocemos por su gran interpretación en “Magical Girl” (2014) o participar en “El otro lado de la cama” (2002), “Días de fútbol” (2003) o en la popular serie “La casa de papel” (2017-2021); es el encargado de dar vida a Norberta. La elección de un actor cis masculino para interpretar a una mujer trans siempre ha sido un tema peliagudo. Siempre se debería respetar la identidad trans a la hora de interpretar dichos personajes. No obstante, Bermejo construye con sensibilidad y bastante cariño a Norberta, dotándola de gestos, expresiones y miradas de lo más emotivas.

Se nota que ha tenido buen asesoramiento y ha sabido tratar al personaje con el respeto que se merece. Le acompaña Adriana Ozores, conocida por participar en films como “El método” (2005) o “Manolito Gafotas” (1999) y que pudimos disfrutar recientemente en “Los pequeños amores” (2024). Ozores tiene un personaje complicado. María, la mujer de Norberta, tiene que comprender qué le está pasando a su antiguo marido y debe aceptar su condición, aunque ello vaya en contra de todo lo que han ido construyendo durante más de cuarenta años. Ozores compone a María con una carga emocional muy difícil pero que, gracias a su experiencia interpretativa, consigue solventar con gran habilidad y actúa de catalizador del público hacia la temática que se está tratando. Completan el reparto Mariona Terés y María Romanillos, actrices que han ido cogiendo fuerza en los últimos años gracias a sus participaciones en series como “Veneno” (2023) o “La Mesías” (2023) y “Antidisturbios” (2020) o la película “La casa” (2024) respectivamente. Terés interpreta a la hija del matrimonio protagonista y Romanillos a le niete no-binarie.

Ambas juegan con la contraposición de pensamientos de los dos ejes centrales del film. Mientras Terés es el pensamiento clásico y que quiere apelar a conservar la antigua normalidad, Romanillos es la nueva voz que apoya a Norberta en su viaje e intenta descubrir a los demás el colectivo. Ambas brindan grandes interpretaciones y inspiran una dulce ternura sobre ellas.

Sonia Escolano tiene experiencia principalmente dirigiendo cortometrajes de terror, misterio y thriller. Firmó una película dramática coral en 2009, “Myna se va” (2009), pero a pesar de ello no tenía una larga experiencia en el largometraje dramático y/o cómico. Quizás por ello deseó colaborar con Belén López Albert, que goza de una larga experiencia como script de continuidad de muchos films españoles de género dramático y cómico. Ambas construyen un lenguaje visual al servicio de la narración, sin arriesgarse con muchas marcas autorales, aunque sí que es interesante cómo transmiten el drama interior de los personajes con el uso de elementos en primer término o reencuadrándolos dentro de sus planos.

La fotografía corre a cargo de David Valldepérez. Valldepérez es conocido por firmar la fotografía de numerosos dramas y comedias españolas como “Amor de madre” (2022) o “El maestro que prometió el mar” (2023). Su tratamiento de la luz es bastante bello y destaca especialmente en las esenas nocturnas, donde los neones de la gran ciudad y el mundo de la calle se contraponen con las cálidas luces de los interiores del hogar. El uso de la cámara en mano es adecuado por el contexto y la tipología de planos son bastante funcionales. Una dirección correcta que, a pesar de no destacar enormemente por su originalidad, funciona.

El diseño de producción es correcto. Destacan las localizaciones escogidas, dando gran variedad de situaciones a la cinta. Desde distintas gasolineras, tiendas, parques donde jugar a la petanca e incluso un bingo lleno de gente mayor. El equipo de maquillaje y peluquería hace un gran trabajo, junto al equipo de vestuario, especialmente, en Norberta, la protagonista. Saben aprovechar bien los rasgos de Bermejo para embellecer su carácter femenino y le dan mucha dignidad. Apuntar también la buena caracterización del personaje de Romanillos.

Arnau Bataller firma las composiciones de la cinta. Bataller es conocido por componer melodías para films como “[•REC] 4: Apocalipsis” (2014), “Herois” (2010) e incluso “Un día perfecto“ (2015). Bataller se centra en emocionar al espectador con composiciones instrumentales que destacan por sus instrumentos de cuerda sin pasarse de emotividad. Sabe mantener bien la emoción y consigue una banda sonora entrañable que acompaña bien los momentos más dramáticos sin pasarse subrayándolos. Además, en su tercer acto sabe aprovechar bien la situación cómica y acaba componiendo divertidas melodías que recuerdan a películas de atracos como la saga “Ocean’s” (2001-2018).En resumen, “Norberta” es una cinta dramática con toques de comedia destinada a un público adulto, que les ayudará a entender mejor el colectivo LGBT+ a la vez que consigue emocionarles. Puede que el público más joven o afín al colectivo encuentre sus diferencias con su tratamiento, pero en general se trata de una cinta agradable que puede ser disfrutada por todo el mundo. Como un abrazo calentito en una fría noche.

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##check## Lo bueno

Las interpretaciones de Luis Bermejo y Adriana Ozores.
El respeto con el que quiere tratar la temática.
Los pequeños toques de humor ayudan a hacer llegar mejor el mensaje.

##times## Lo malo

La elección de un actor cis masculino para retratar la vida de una mujer trans no termina de ser muy correcto.
La dirección es algo normalita.
El guion cae en algunos convencionalismos que juegan en contra de su mensaje.