El jesuita Pedro Pablo Ladrón de Guevara en una segunda edición impresa de 1910, escribe una serie de juicios acerca de más de dos mil novelistas de ayer y de hoy (entonces). Además de estas valoraciones, que no son más que un nuevo Índice Censor dependiente de la mismísima Congregación para la Doctrina de la Fe (Antigua Inquisición), señala una serie de advertencias por las que no conviene leer novelas.
Nueve tesoros que se pierden con la lectura de novelas