Novela de misterio y thriller | BlackFebruary

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Bienvenido a otro capítulo de esta serie de vídeos del BlackFebruary. Hoy toca pasear por la historia y las obras de otro de los géneros que ha logrado que este tipo de historias tenga la fama y la cantidad de seguidores que, a día de hoy, todavía mantiene. Por ello, te quiero hablar sobre la novela de suspense o thriller, que no dejan de ser sinónimos de una misma realidad.

Qué es la novela de suspenso o thriller

A grandes rasgos, se puede definir el suspenso como un recurso literario cuyo principal objetivo es el de mantener al lector a la expectativa de lo que va a ocurrir —generalmente en una situación de tensión—, tanto a los personajes que componen la trama, como a otros elementos que cuenten con un determinado peso en la misma. De esta manera, la extrapolación a género se consigue cuando esta circunstancia es aquella que tiene un mayor peso en la narración.

Como género, el thriller está caracterizado por su ritmo elevado, por la acción constante que se muestra en las páginas de la novela y por unos protagonistas que, normalmente a partir del ingenio, tienen que frustrar, contrarreloj, los planes de un ser más poderoso y con más conocimientos que estos. Normalmente, este sentimiento de carrera constante está producido por los personajes antagonistas.

Para que este puzle funcione resulta imprescindible que el protagonista pueda sentir empatía por el personaje protagonista. Es la única manera de que pueda conmoverse a partir de la tensión que este experimentará a lo largo de la narración.

La estructura de la historia de suspenso

Cuando se quiere crear un thriller existen una serie de pautas que se pueden tener en cuenta para conformar, lo que sería, el esqueleto de esta historia:

• Argumento: conformado por tesis bien fundamentadas.
• Protagonista: acostumbra a ser duro, ingenioso y acostumbrado a desenvolverse en el peligro. Ejemplos claros son policías, espías, detectives, profesores…
• Antagonistas: villanos preparados, poderosos e influyentes. Destacan políticos, mafiosos, asesinos.
• Meta del protagonista: frustrar los planes de ese enemigo poderoso y encontrar la respuesta a las preguntas planteadas en la historia.
• Desarrollo del relato: posee elementos de peligro, asesinatos, confrontaciones que varían la intensidad…

Características del género del suspense

Como te he ido diciendo desde el principio de este artículo, en el thriller predomina una sensación constante de incertidumbre o de ansiedad. Por tanto, la narración de los hechos se va a concentrar en ser capaz de transmitir esta idea.

De esta manera, se puede hacer referencia a que el término suspenso en sí se refiere a la combinación de anticipación de desenlaces desagradables, mezclado con incertidumbre y oscuridad respecto de las esperanzas en el futuro.

Es importante ser capaz de diferenciar el suspenso del misterio. Después de todo, en el thriller se otorga al público toda la información necesaria sobre los acontecimientos. Es este precisamente el gancho que mantiene la expectativa activa en todo momento.

Si analizáramos el género con una lupa, lo primero que se observaría es que está compuesto por ritmo rápido, acción constante y héroes ingeniosos que tienen que frustrar planes de villanos más poderosos. Todo ello, aderezado con cliffhangers, pistas falsas y recursos para enganchar al lector.

El género del suspense se caracteriza por querer provocar un interés a través de la emoción, pero también se le añade el carácter mental. Tiene que interesar cognitivamente al lector.

Para ello se utiiliza la técnica de la focalización. Es decir, se define el centro del relato y se establece como una relación de saber entre el narrador y sus personajes. A gusto del escritor estará la idea de brindar toda la información, o solo una parte. En caso de que se manipule, es posible conseguir poderosos efectos. Se genera una mayor curiosidad y sorpresa, aunque es más complicado de utilizar para construir el suspenso.

Una de las claves para generar suspense es la narración de una manera atemporal o inversa cronológicamente. Esto conseguirá que el lector, además de atender a las páginas, tenga que realizar el esfuerzo de reconstrucción del tiempo, por lo que se alargará el tiempo de resolución y se conseguirá una mayor implicación e interés de este.

Otra táctica repetidamente empleada para la generación de suspense es la fragmentación de la información. Con ello se consigue sembrar de dudas la mente del lector y estas no llegarán siempre a resolverse. Este construirá expectativas en su mente, que jugarán con la manera en la que ve a los personajes, la trama y los indicios.

Es importante señalar que, al final, el suspense o el thriller no se definen por su temática, sino por la manera en la que se aproximan a esta.

Narrativa tensional

Durante mucho tiempo se ha considerado la literatura de suspenso o thriller como un género por debajo del resto. Una de las muchas razones que ha llevado a esta realidad, es que se ha entendido que funciona mucho mejor como guion.

De esta manera, cuando Raphael Baroni define el interesante concepto de narrativa tensional, lo hace realizando hincapié en el tipo de ansiedad popular producida por una narración enigmática, que alarga las resoluciones generando estrés y tensión a partir de actos repentinos e inesperados, a través del lento curso de los acontecimientos en los que todo lector aguarda que ocurra algo, pero esta realidad no llega a suceder.

De esta manera, al enfrentarse al thriller se puede afirmar que la construcción de una buena trama consiste en la desfiguración de la historia por un narrador apropiado, que tenga, precisamente, la intención de transformar una verdad en enigma.

Aristóteles, el suspenso y la literatura

Si queremos llegar al primer documento escrito sobre suspense del que tenemos referencias, hay que viajar hasta la Grecia Antigua. Su libro Poética es un referente en la construcción literaria y en él se marca este elemento como uno de los fundamentales. Allí, el famoso filósofo afirma que consiste en generar, mediante un peligro real, un cierto grado de esperanza.

Además, señala resultados comunes:

• El impacto del peligro. Gracias a él la audiencia se sensibiliza y entristece por lo que pueda pasar.
• Si no hay esperanza, o esta es muy remota, la audiencia se conmociona y desespera.
• Si la esperanza se realiza o se confirma, se genera alegría y satisfacción en la audiencia.

La paradoja del suspenso

Son muchos los autores que han tratado de explicar en qué consiste la paradoja del suspenso. Esta aparece cuando la incertidumbre sobre el futuro se encuentra neutralizada, a causa de que la audiencia ya sabe cómo se va a resolver la historia.

Esto es todo lo que tienes que saber para empezar a conocer el género del suspenso o el thriller en la literatura. Me hubiera gustado adentrarme más, pero la mayor parte de los estudios que se han realizado son basados en el cine y no tenían el enfoque que yo buscaba, por lo que prefiero plantarme en este punto. ¿Qué te parece a ti este género?

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