Título: Now You See Me
Dirección: Louis LeterrierGuión: Boaz Yakin, Edward Ricourt, Ed Solomon, Boaz Yakin (historia) y Edward Ricourt (historia)Género: Crimen, Misterio, ThrillerDuración: 115 minutosOrígen: Estados Unidos, FranciaAño: 2013
Reparto: Woody Harrelson, Jesse Eisenberg, Mark Ruffalo, Morgan Freeman, Michael Cane, Melanie Laurent, Isla Fisher, Dave Franco, etc
La gran estafa... al espectador, al cine y a la magia
El secreto para que una película de misterio funcione o al menos quede bien, es brindarle al espectador algun indicio para que sepa un poco más que los personajes que buscan develar la trama, y así lograr una complicidad en la que, una vez llegada la resolución, se alcance el impacto adecuado ya sea mediante la catársis de los protagonistas o una vueltita de tuerca que sea más o menos creíble.Insoportablemente, Now You See Me hace todo lo contrario a lo largo de sus interminables 115 minutos, en los que la histroria se ramifica tanto con un reparto coral inmenso (y lleno de super-estrellas de gran talento) que a lo último todo queda resuelto con un artificio tan estafador y tan tramposo que es casi como un escupitajo a la cara.
Conforme avanza la trama, se va agregando más y más información que sólo juega para el guión. Esto se comprueba con el final, cuando queda en evidencia que todo es un trabajo meticuloso para dejar como un estúpido al que está mirando la película. Lo peor es que no lo logra, porque es todo tan confuso que ni siquiera queda bien claro lo que acaba de pasar.
Now You See Me es una película sobre magos, ilusionistas, pero no cree ni en la magia ni en el ilusionismo. Cree en la estafa, en el artificio impostado y en el juego hábil de manos (y supuestamente de la mente, pero eso sería muy condescendiente con Leterrier) antes que en la capacidad de asombro por un truco bien hecho. Ah, ojo, pero sí cree en la hipnósis...
Los personajes principales, un cuarteto de delincuentes (Harrelson, Eisenberg, Franco y Fisher) en un proceso de iniciación que tienen al FBI en vilo por una serie de acometidas delictivas, están muy descuidados y no juegan ningún rol definido. Parecen ser anti-héroes, pero no son más que una mera y burda herramienta para el truco final. El truco de los cinco guionistas (sí, cinco) que tan estúpidamente celebran su hazaña una vez terminada toda la maraña de pavadas.
Y alrededor de esa historia están Morgan Freeman, que no sabemos bien qué papel juega, y la dupla de policías de Mark Ruffalo y Melanie Laurent, que además de ambigua está en una tensión romántica constante (sugerida en guión, con diálogo y todo... sí, así de grasa es la película) y que al final tienen que poner la cara cuando todo se fue al carajo y no hay retorno. También está Michael Cane, quizás en el papel más desaprovechado que le tocó interpretar en toda su carrera, que también es engañado. Todos son engañados, todos somos engañados. Incluso en el clímax, los cuatro ilusionistas también son engañados. Una estupidez gigante, hecha con un presupuesto inmenso, filmada de forma horrible (Leterrier, ¡dejá quieta la cámara, viejo!) y fotografiada para que parezca que en el proyecto paticipó Wally Pfister, cuando en realidad es el grosso de Larry Fong; otro desaprovechado. El reparto, un lujo en sí, hace lo que puede, pero está también malgastado a niveles inconmesurables.
Now You See Me se toma muy en serio, y es soberbia a más no poder. Al terminar la película casi se pueden escuchar las risas burlonas de Leterrier y su crew por lo que acaba de hacerle al espectador. Y lo peor es que la historia se cree una bofetada pensante, cuando en realidad no es más que una estupidez gigante, imposible de creer, inverosímil a más no poder y burda, muy burda y tonta. Y esto solo es porque nunca se tomó el trabajo de acordarse del espectador y hacerlo partícipe del artificio, mostrarle un poco los hilos en el algún momento y no intentar lucirse como si fuera el truco más grande hecho en mucho tiempo.