Nueva entrega de la “subastafa” eléctrica CESUR

La 16ª Subasta CESUR realizada el pasado martes 27 de Septiembre de 2011, ha sido la última entrega de lo que se pudiera considerar a todas luces una “subastafa”. De nuevo, el resultado de la misma ha originado un incremento del precio del kWh, en concreto, el alza supone una presión del 5,9% sobre la tarifa (TUR) de la que disfrutan cerca de 24 millones de consumidores, que debiera el gobierno subir en estos primeros días de octubre.

El Gobierno ya se ha apresurado a confirmar que no subirá el recibo de la luz, pese al resultado de la subasta (recordad que tenemos las elecciones generales a la vuelta de la esquina, quedaría muy feo subirles la luz a los votantes en plena campaña). En este artículo os queremos exponer cómo funciona esto de las subasta eléctricas y qué es lo que pasa que cada vez tenemos más déficit tarifario (“la energía cuesta más cara que el precio que fija el Gobierno a los consumidores” ) que suelen decir. Es el circo financiero mejor montado nunca, con el beneplácito de los sucesivos gobiernos y a costa de todos los contribuyentes.

LA NOTICIA:

En la subasta se ofertaron simultáneamente, para el cuarto trimestre de 2011, un producto de carga base a tres meses, que consiste en la diferencia de precio entre el precio de adjudicación del producto en la subasta y el precio horario del mercado diario gestionado por OMEL  (OMIE), para todas las horas comprendidas en el horizonte temporal subastado, por un total de 3.800 MW en cada hora, y un producto de carga punta a tres meses, que consiste en la diferencia de precio entre el precio de adjudicación del producto en la subasta y el precio horario del mercado diario gestionado por OMEL(OMIE) para todas las horas comprendidas entre las 8:00 y las 20:00 CET, de todos los días naturales, excepto sábados y domingos, durante el cuarto trimestre del año 2011, por un total de 458 MW en cada hora.

El precio de cierre de 57,99 euros el megavatio/hora (0,5 euros por encima del mercado OTC de un día antes y 53,20 euros por megavatio/hora con respecto a la anterior subasta) y el producto punta fue adjudicado a un precio de cierre de 63,00 euros el megavatio/hora (56,63 euros por megavatio hora en junio). Ahora si el precio base de la subasta es 57,99 euros y el término de energía es de 88,42, la TUR quedaría en 182,5 euros. Están pendientes de la validación de la Comisión Nacional de Energía (CNE), suponen alrededor de la mitad de la Tarifa de Último Recurso (TUR).

Tras la subasta, Industria tiene la opción de reafirmarse en su propuesta de congelar de los peajes eléctricos, con lo que la luz subiría un 5,9%, o puede rebajar esta partida de costes regulados para mantener la TUR actual. Esta opción evitaría una subida de luz para los consumidores, pero agravaría el problema del déficit de tarifa. Es lo segundo lo que se ha optado.

En la anterior subasta, el término de energía se encareció un 2,7%, lo que, unido a la congelación de peajes aplicada por Industria, provocó una subida del 1,5% en la revisión de la TUR de julio. En marzo, aprovechando un descenso en el precio de la electricidad, el Gobierno elevó un 10% los peajes, con lo que la TUR quedó congelada. La subida trimestral de julio se sumó a la ya aplicada en enero, del 9,8%, de modo que la TUR acumula un encarecimiento superior al 10% en 2011. En 2010 subió un 2,6%, en 2009 un 3,5% y en 2008 un 9,08%. El precio de la luz viene subiendo cada año desde 2003, aunque sólo desde 2006 (5,28%) lo hace por encima del IPC. Fuente: EnergíaDiario

FUNCIONAMIENTO DE LAS SUBASTAS

• Determinan, cada tres meses, el coste de la energía eléctrica.
• El precio que sale de esas subastas supone el 50% de la Tarifa de Último Recurso (TUR), a la que están acogidos la mayoría de los consumidores domésticos.

Para empezar, podemos citar una explicación simple pero acertada que se explica en este artículo:

Las empresas eléctricas han segregado su división de generación de su división de comercialización, por lo que alegan que tienen beneficios generando energía pero tienen pérdidas vendiéndola, porque las tarifas del Gobierno las obligan a comercializarla por debajo del precio real. (…) La gracia del asunto, si os fijáis, es que las empresas generadoras, que son ellos, venden la electricidad a las empresas comercializadoras, que también son ellos, pero con otro nombre y ahí es donde se genera el déficit, porque las generadoras se la venden a precios superiores al precio máximo al que la pueden vender las comercializadoras. ¿Es ese un verdadero déficit? Por supuesto que no. Es un caso de cucurucho financiero, muy conocido desde antiguo, en el que las distintas sucursales de una misma empresa se hinchan las facturas que se pasan entre sí para trasladar las cuentas de resultados de un lado a otro de la entidad. Y si encima hay un pagano al que exigirle ese déficit, entonces la alegría de semejante farándula no tiene límites.

MÁS INFORMACIÓN:

¿Qué son las subastas de energía?Son subastas de adquisiciones de energía eléctrica. Son de tipo financiero, es decir, en las que no se produce una entrega física del producto, ya que lo que se subasta es energía.Reciben el nombre de CESUR: Contratos de Energía para el Suministro de Último Recurso.¿Quién las gestiona? OMEL Mercados, filial de OMEL, empresa privada al 100% que acaba de cambiar su nombre por el de OMIE tras la firma de un convenio internacional con Portugal. Supervisan las subastas la Comisión Nacional de Energía y la Comisión Nacional del Mercado de Valores.¿Desde cuándo realiza OMEL Mercados estas subastas? Desde septiembre de 2008; comenzaron a partir de la sexta subasta de energía, aunque hasta el 1 de julio de 2009 el precio fijado para la energía fue solo una cifra más bien de referencia. A partir de la creación de la Tarifa de Último Recurso, el precio de la energía supone el 50% de la misma. Las cinco primeras subastas las realizó desde 2007 la empresa NERA Economic Consulting, una firma internacional de consultores en economía.¿Qué cantidad total de energía se subasta? La Secretaría de Estado de Energía determina las cantidades con una resolución previa a cada subasta, como dicta la ley. Para la última puja, que se celebró el 27 de septiembre para establecer el coste de la energía de cara al último trimestre de 2011, estableció: 3.800 MW de producto de carga base y 458 MW de producto de carga punta.¿Qué son los productos de carga base y punta? Son los productos que se ofertan en la subasta. El producto de carga base es la energía constante que se compromete a suministrar el vendedor, en MW por hora, desde las 0:00 horas hasta las 24 horas y durante todos los días de los tres meses a los que se refiere de la subasta. El producto de carga punta se refiere al suministro desde las 8 horas hasta las 20 horas y solo de lunes a viernes (las horas punta de consumo). Ambos productos se basan en la diferencia entre los precios resultantes de la subasta y el precio horario del mercado diario español durante un periodo de liquidación determinado, en este caso, tres meses. Se subastan de forma simultánea.¿Quién participa en una subasta de energía? Por un lado, las cinco empresas Comercializadoras de Último Recurso: Endesa, Iberdrola, Gas Natural, E.ON y HC Naturgas. Por otro lado, los vendedores, que pujan por la adjudicación de los productos y cuyo número varía de una subasta a otra.¿Qué pasa antes de la subasta? Que los vendedores solicitan participar, en una fase llamada de precalificación, y tienen que ser, por así decirlo, declarados aptos para poder hacerlo. Para ello deben cumplir las “condiciones de garantías y requisitos formales establecidos para cada subasta”, según establece la Orden ITC/1601/2010, de 11 de junio, por la que se regulan las subastas CESUR. Se establece, por tanto, un calendario con varias fases para cada subasta.¿Quién pone las reglas? La Secretaría de Estado de Energía, que en su resolución previa decide: qué productos se subastan y sus periodos de liquidación; las cantidades; los precios de salida; las reglas durante la subasta y, en su caso, el contrato marco; la fecha de la subasta; y la información pública que se da después. De forma hipócrita, ahora desde el Gobierno se insta a la CNE de investigar las subastan electricas, que juegan con las reglas que ellos mismos aprobaron…¿Cómo se desarrolla una subasta de energía? Hay un precio de salida, diferente para cada producto, que va disminuyendo en distintas rondas de pujas. Este proceso, denominado “subasta de reloj descendente”, termina cuando se logra un equilibrio entre oferta y demanda en cada producto. La subasta se realiza por bloques y las modificaciones del precio a la baja tras cada ronda se realizan mediante “algoritmos confidenciales” que no se desvelan nunca.¿No son públicos todos los datos? No toda la información sobre las subastas se hace pública. Sobre todo en relación a los comportamientos de los participantes durante el proceso (por ejemplo, si no acuden, se retiran, etc). Tampoco se explica cómo se recalculan los precios durante la subasta. Rubén Sánchez, portavoz de Facua, asegura que su organización “lleva años denunciando la opacidad del sistema”, ya que “nos hacen creer que producir energía es muy caro”. Para Sánchez, habría que cambiar la "metodología de cálculo", que “hincha el déficit tarifario”, aunque manteniendo siempre la parte regulada por el Gobierno. Sobre los datos confidenciales, apunta a que el Ejecutivo “se fía” de lo que sale de la subasta y recuerda que la CNE abrió hace unos días un expediente informativo que pretende investigar los movimientos en los mercados no organizados (OTC) durante los días previos a una subasta.¿Cuánto dura una subasta de energía? No hay un tiempo fijo, pero según explican fuentes del sector, ”varias horas”. Por el momento, no se ha publicado el número de rondas que han sido necesarias en la subasta número 16; en la 15, hubo 17 rondas. Para la subasta 16 se estableció que la primera ronda duraría 25 minutos, y el resto, 20.¿Es presencial? No, se lleva a cabo por Internet mediante un sistema informático de subastas.¿Cuánto cuesta una subasta de energía? La última, 205.000 euros. Esta cantidad incluye, según la Secretaría de Estado, la “gestión, liquidación, facturación y gestión de cobros y pagos, y cálculo y gestión de garantías”.¿Qué pasa después de la subasta? En 24 horas se hace pública la cantidad total adjudicada y el precio al que se ha comprado. Sin embargo, la subasta no termina hasta que la Comisión Nacional de la Energía (CNE) elabora un informe tras comprobar que el proceso ha sido correcto.¿Cuánto pueden comprar las comercializadoras? La Secretaría de Estado de Energía establece un volumen máximo para cada una.¿Qué precio estimado de coste para la energía resulta de estas subastas? En la última, la 16, el producto de carga base fue adjudicado a un precio de cierre de 57,99 €/MWh y el producto punta fue adjudicado a un precio de cierre de 63,00 €/MWh. Fuente: 20minutos

DÉFICIT TARIFARIO

¿Y por cuánto va ese déficit? Pues no es para preocuparse, tan sólo le "debemos" a las eléctricas unos 22.392 millones de euros de nada, incluyendo los 2.500 millones de euros del desajuste de 2010. Y la CNE sigue otro año más sin decidirse a meter mano en serio…

*** ACTUALIZACIÓN 04/10/2011 ***

Noticia reciente sobre quiénes son los compradores de la electricidad en esta subasta, atentos: “El 65% de los vendedores de electricidad en las subastas de la tarifa procede de fuera de España“.

¿Hasta cuándo se va a permitir este robo a todos los contribuyentes? ¿Cuándo se va a acabar con la farsa del déficit tarifario?. Si las renovables bajan el precio de kWh y el carbón lo sube, ¿por qué se sigue permitiendo quemar carbón ineficiente e inútil en el mix?:

“los propietarios de las centrales de carbón son también propietarios de plantas que utilizan otras tecnologías de generación eléctrica. Y ahora hay que quemar carbón nacional por obligación (RD 134/2010); carbón que, además, recibe tanto ayudas directas como indirectas.” Fuente:  El coste de la luz se dispara por culpa del carbón

¿Por qué Felipe González y Aznar están ahora en empresas del sector energético?…. ah vale, ya me empieza a cuadrar. Quizás Sebastián o ZP se quieran jubilar a imagen y semenjanza. Han estado gobernando para ellas, ¿qué regalos les esperarán?.