Después de haber rastreado a estos simpáticos animales en el océano Antártico se demuestran que estos pingüinos viajan más lejos y se sumergen durante más tiempo del que teníamos pensado hasta ahora.
Concretamente han superado el récord anterior por 5 minutos, es decir, que los pingüinos emperador pueden aguantar debajo del agua ¡hasta unos 32,2 minutos!
Las razones aún se desconocen, aunque en el estudio, publicado a mediados del mes de abril y recogido por el medio británico “The Guardian”, los investigadores creen que la razón principal puede ser debida a la dificultad de encontrar comida por los efectos del cambio climático.
Siendo estos pingüinos los más altos y pesados de su especie pueden además bajar hasta los 500 metros por debajo de las aguas del Antártico, donde habitan, por su fisiología particular.
Dicho estudio, llevada a cabo en marzo de 2013 y publicado en "Marine Ecology Progress Series" (una revista especializada en ecología marina) buscaba estudiar el forrajeo (búsqueda de comida) y la capacidad de zambullirse de los pingüinos que crían a sus pequeños.
De esta forma, se rastrearon a 20 ejemplares a través de satélite, pero se dieron cuenta de que no eran los que se ocupaban de los recién nacidos sino los que recorrían kilómetros en búsqueda de comida.
De esta equivocación resultaron nuevos avances científicos.
Los pingüinos emperador son capaces de recorrer distancias de entre los 270 y 9.000 km además de zambullirse durante más de media hora, lo que antes era habitual sólo unos 8 minutos.
Necesitando mucho más tiempo para recuperarse después de esta gran clase de buceo.
En el estudio llevado a cabo por Kim Goetz (Instituto Nacional de Investigación de Agua y Atmósfera de Nueva Zelanda), Gerald Kooyman (Institución Scripps de Oceanografía) y Brigitte McDonald (Laboratorios marinos Moss Landing) especifican que:
"Este estudio ha demostrado que los animales van mucho más lejos de lo que pensábamos y esto tiene una serie de implicaciones en cuanto a su supervivencia. Comprender su ciclo de vida completo, especialmente cuando las aves no están ocupadas con la cría de pequeños, es fundamental para predecir cómo los pingüinos emperador podrían responder a los cambios ambientales”.Goezt a su vez indica:
“Lo que todavía no sabemos es si es más difícil [para los pingüinos] encontrar comida y tienen que zambullirse más profundo, o si por alguna razón se desvían de su camino y no pueden encontrar un hoyo para respirar”.Igualmente, los científicos sugieren que si un animal gasta su oxígeno y su energía para zambullirse más profundamente y más tiempo de lo que viene siendo habitual, es por algo “que vale la pena”.
Con un total de 96.000 acciones registradas entre marzo y diciembre de 2013 es obvio que los pingüinos emperador se encuentran nadando más hondo y durante más tiempo, especialmente a lo largo de la mañana y el crepúsculo que durante la noche.
Por el presente, la investigación tendrá que continuar para conocer los motivos que le empujan a ello.
Los científicos pretenden poner cámaras sobre las aves para poder observar sin perderse ningún detalle de lo que hacen debajo del hielo y poder así obtener más datos.
Artículo 187; La cuarta causa de mortalidad, el aire que respiramos
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