Precio: 0,99€/ 8,88€
Sobre el autor: Seb Kirby
Impresiones
Hoy os traemos un thriller, hacía ya tiempo que no me tocaba ninguno y no ha defraudado mis expectativas.
En las primeras páginas me he sentido un poquito desubicada, la narración me ha dispersado un poco. No sé si debido a la utilización de la primera persona, que por lo general hacen más cercana la narración, pero en esta ocasión me ha llevado a la parte contraria. Poco a poco le he ido tomando más ritmo, gracias a la abundancia de diálogos que han hecho la historia más ágil.
Para una novela policíaca tal vez vea que la elección de esta persona para la narración es más complicada porque nos perdemos más matices que con un narrador omnisciente. Aún así está bastante bien hilvanada y llevada.
Para mí uno de los puntos fuertes es el arte y sus numerosas referencias al mismo porque creo que enriquecen al texto; lo llenan y lo complementan para no quedarse únicamente en lo ocurrido en las primeras páginas, aunque lógicamente es el hilo conductor. En cuanto a las referencias del arte al final del libro encontraremos una breve anotación de alguna de las pinturas y sus técnicas sobre las que habla el protagonista en un momento dado. Esto llevará al lector en ocasiones a buscar las mismas para visualizar el cuadro porque no todas son muy conocidas.
La acción tampoco se centra en un único país con lo que pasa Inglaterra a Italia; a Florencia, Venecia... Con unas descripciones justas, primando más la historia; conspiraciones, fraudes...
Se distribuye en cinco partes ya su vez en capítulos, siendo estos correlativos. Y la acción tiene sus puntos álgidos.
Creo que es el primer libro del autor traducido al castellano, pero tiene otros del mismo género, incluso más del mismo protagonista. Bueno yo con mi nivel de inglés poco voy a poder leer, pero animo a los que sí pueden a buscarlos en Amazon.
Excepto el principio y esa forma de narrar que me ha costado al principio (como apunté) el libro está entretenido y mantiene la tensión justa, bien aderezado. Con unos personajes coherentes con la historia y el entorno, vamos que los malos son malos de verdad como se suele decir, nada de medias tintas.