Las gafas de sol Oakley han sido sinónimo de ciclismo desde que Greg Lemond las usó en el Tour de Francia en 1985. Oakley es conocida por la calidad de sus lentes y la claridad es excelente, con ópticas optimizadas para ciclismo de carretera, una vez que las pruebes no las vas a querer dejar.
Oakley ha trabajado en conjunto con el ciclista profesional Mark Cavendish para desarrollar las gafas Oakley Jawbreaker. El resultado: La visión superior de las gafas aumentó, pero el logotipo en el costado obstruye la visión periférica lateral. No es gran cosa, pero es muy notable si estás acostumbrado a las gafas de sol de ciclismo para hombres sin montura o con una mejor visión periférica lateral.
A primera vista. Oakley Jawbreaker
Lo primero es lo primero, los Jawbreakers ciertamente tienen una apariencia muy atrevida y muy distintiva en comparación con otras gafas para ciclismo de la marca Oakley.
Las gafas Oakley Jawbreaker, los amarás o los odiarás. Te insto a que, al menos, te las pruebes antes de descartarlas rápidamente. El impacto de lo nuevo ha disminuido ahora que son casi comunes entre el pelotón profesional y el club local. Su aspecto no les gana a los fanáticos inmediatos, pero después de un viaje con ellas, es posible que no pueda volver a sus gafas anteriores.
También viene con la nueva tecnología de lentes Prizm de la compañía, que está específicamente diseñada para el ciclismo de montaña, y las sutiles diferencias en las condiciones de suciedad en un sendero mejorando de manera considerable la vision en terrenos sucios y con patrones de colores obscuros.
La lente también presenta la óptica de alta definición patentada de Oakley, y es nítida, con una distorsión absolutamente nula.
La nueva lente Prizm es realmente impresionante, la forma en que resalta el camino en todas las condiciones de luz tiene que verse para creer, pero el problema que tienen las gafas Oakley Jawbreaker es que se rayan con extrema facilidad y es por ello que no las recomiendo si eres un manitas descuidado.
Las gafas Oakley Jawbreaker estan muy bien ventiladas, pero todavía se empaña en condiciones húmedas, y esto significa que necesita limpieza con más frecuencia, y ahí es cuando corre el riesgo de rayar las gafas. Incluso una pequeña particula de suciedad frotada contra la lente dejará una marca, y con lentes Prizm de repuesto que cuestan 70 euros, es una propuesta costosa.
Las gafas son muy cómodas. Los brazos de las lentes son ajustables y son un poco más cortos y planos que los Radar, lo que significa que son más compatibles con los dispositivos de retención en la mayoría de los cascos. No ejercen una presión notable en las sienes, pero no se mueven, incluso cuando el sudor gotea de su cara. Las piezas nasales mantienen los anteojos cómodamente ajustados a su cara.
- Las gafas son insuperables
- Cómodas
- No se empañan significativamente
- Muchos colores para elegir
- La visión periférica se sacrifica en favor del estilo.
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