Los piercing me producen rechazo, hice una entrevista de trabajo y la candidata al puesto se presento con un piercing con forma de gancho que le atravezaba el labio inferior y estaba coronado con un esfera metalica, esa visión me indispuso, estaba yo como hipnotizado, no la veia a ella, solo veia yo el adminiculo que le perforaba su carne, habia tensión en el ambiente, la conversación no fluia, ella intuyo el problema, muy condencendiente se retiro por unos minutos y volvio despues desprovista del gancho, le agradeci el gesto y la conversación pudo seguir, hacia calor, ella se quito la chaqueta, tenia una bonita figura y empece a mirarla con otros ojos, su flexibilidad y la madurez que demostro me sorprendierón gratamente y la contrate. Cuando se despidio de mi y me dio la espalda le vi un tatuaje abajo de la nuca, la detuve, mis recelos volvierón a atenazarme, ella vio mi desconcierto, pense que tal vez necesitaba esa marca ante la fragilidad de sus compromisos, me miro largamente y saco de su bolso una bufanda que muy coqueta se la puso alrededor del cuello, giro su cuerpo dando una vuelta completa, ante mis ojos y el tatuaje de su espalda no se veia mas, quede tranquilo, recupere el aplomo, hoy somos buenos amigos y compañeros de trabajo.