OK, enough, goodbye

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Especial. Cobertura BAFICI 2012
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Proyectada en la sección Futuro de la 14ª edición del BAFICI, OK, enough, goodbye cuenta la historia de un cuarentón que debe encarar una nueva etapa personal después de que su madre lo abandona. Ésta no es una metáfora eufemística: en efecto, la señora en cuestión se muda de incógnito a otra ciudad, con la esperanza de que su hijo grandulón corte de una vez el cortón umbilical y forme su propia familia como Dios manda.

La coproducción libanesa-saudí ambienta este relato en Trípoli. Los directores Rania Attieh y Daniel García articulan su ficción con separadores sobre la arquitectura e historia de la ciudad, pensados para anunciar los escenarios naturales donde se llevará a cabo la acción. Esta suerte de microdocumentales también deslizan un tributo a cierta capacidad de sobrevida urbana tras quince años de guerra civil.

Algunos espectadores creemos reconocer un paralelismo entre un país (o una región) y un hombre que necesitan dar una vuelta de página y madurar. Por lo pronto, los inconvenientes que el protagonista enfrenta tras la partida de su madre se entrecruzan con problemáticas de índole nacional como los cortes sistemáticos de luz (y los piquetes en reclamo de un mejor servicio), el ejercicio más o menos encubierto de la prostitución, la explotación de mujeres de origen filipino, etíope, srilanqués contratadas como mucamas todo terreno.

La dupla de realizadores filma la cotidianeidad de este hijo un poco a la deriva con sensibilidad y una pizca de sentido del humor. Quizás algunos espectadores sientan que el guión desvaría por momentos (o se va por las ramas) pero enseguida se darán cuenta de que nunca pierde el hilo conductor.

OK, enough, goodbye se proyectará hoy a las 16.15 y el viernes a las 13 en el shopping Abasto. Vale la pena reservarle un lugar en la agenda baficiana a un film cuya sola procedencia provocará la indiferencia del circuito comercial.